La noche de anoche podría describirse en una sola palabra siendo “tortuosa” la elegida. Para comenzar, el sofá es sumamente incomodo a comparación del increíble colchón que tengo, y para finalizar, ella. Se supone que no debería ni siquiera pensarlo, pero es sumamente hermosa y no he podido dejar de mirarla. Ese camisón corto de seda color beige ha sido una tortura inmensa y a pesar del descontrol que ha causado en mi, tuve que venir a acostarme a la cama sin que ella se diera cuenta, y esto fue peor. Apreciar la belleza de su rostro tan de cerca me ha hecho cuestionar mi vida entera… su cuerpo de curvas perfectamente moderadas tentó al mío por horas y su cabello castaño fue victima de mis ganas de acariciarlo.
Estuve horas intentando convencerme de que no podía mirarla así y he fallado
