Diluvió la mayor parte de la noche y cuando Jonathan abrió los ojos, se sentía igual que cuando tienes ese tipo de sueño donde encuentras un gran tesoro y al despertar, buscas ese gran tesoro entre tu sabanas, pero tristemente se esfumo junto con el sueño. Es la mayor frustración que llego a sentir de niño y ahora se sentía igual después de haber besado a Diana, hacia tan solo unas cuantas horas. Mientras la besaba, casi podía verse a sí mismo separando sus piernas para luego hundirse profundamente en ella. ¡Dios! aun podía sentir la frustración hormigueando bajo su piel y sus brazos dolían por la necesidad de abrazarla.
Durante ocho años logro lidiar con esas lacerantes sensaciones a pura fuerza de voluntad y porque ver a Denisse le recordaba su traición y el consecuente rechazo de Dian
