Hacerte poesía es lo mejor que me sale en estos momentos, y hoy me amaneceré escribiendo y hablaré de cada cosa que me gusta de ti lo e repetido un sin fin de veces y estás líneas dicen tantas cosas, traes el universo en contradicción desafías las leyes de la gravedad que me mantienen cacheteando las banquetas pensando de la manera más inexplicable en ti, en tu belleza eres tan perfecta, tu sonrisa es la más hermosa que he visto que provoca un choque eléctrico cañón corriendo de arriba abajo en mi cuerpo, me gusta observarte cada que estás despistada porque en ti veo un sin fin de galaxias como las que llevas bajo las cejas, podrá haber un montón de gente pero desde que apareciste para mi solo hay unos ojos, no quiero volver a buscar magia en otra parte. Podré estar tan joven para entenderlo todo, pero aun así, perdí la cuenta de las veces donde me volví adicta a ver tu risa y como arrugas la nariz cuando lo haces, te quiero, y seguramente suena tan absurdo todo, pero lo hice mas haya de lo cotidiano, de lo humanamente posible, y sin duda, mas allá de donde la poesía apenas raspa los callejones oscuros al candil de una luna.
Seguramente eres una chica romántica que se emociona y le brillan los ojitos cuando le escriben poesía, seguro eres de esas que aun guarda las cartas en su cajón y hasta el más ridículo detalle cursi lo atesoras con todo el corazón, y quizá esperas uno de esos amores chingones que no se acobarden en tus días malos ni cuando te quedas a oscuras, uno que no tire la toalla cuando el paisaje no pinte de la mejor manera, uno que te ponga a bailar cada mañana con esa alma tan bonita que te cargas.
Tienes arte en todos tus rincones, también menta y aroma a café en la palma de tu mano, tu no ocupas nada, eres literatura abstracta, prohibida, indulgente. Te puedo contar las pestañas, te puedo aprender de memoria, te puedo hablar de ese brillo tan hermoso que sale de tus ojos, te puedo contar las líneas de tus labios, te puedo hablar de la forma de tu nariz, te puedo describir el arco de tus cejas, me puedo enamorar del tamaño de tus orejas, te puedo dibujar en tus párpados y hacer poesía en tu barbilla porque cualquiera podría perder la razón contigo.
Deja que por lo menos lo intente, baja poquito la indiferencia, tengo claro que no soy lo suficiente para ti, pero te imagino de todos los colores e incluso puedo decir que de azul y verde te vez perfecta, podría verte por horas como el pintor al marco antes de plasmar algo sobre el lienzo, no te pido que caigas rendida, sólo que contestes de vez en cuando y me cuentes lo que te pasa por la cabeza.
Aquí tienes un poema quizá con faltas de ortografía y sin uno que otro signo, tratando de explicarte qué como tu no hay ninguna otra, que llevo un montón de noches practicando frente al espejo qué decirte pero mi torpeza no me ayuda en nada, desvelándome con la idea proponerte un viaje en helicóptero o proponerte un mochilazo por todas las playas que se nos atraviesen.
Yo no sé nada en absoluto del amor, pero sé que no se trata de convencer a nadie, que simplemente son dos personas que tienen las mismas ganas de darse en la madre, que quieren estar juntas y que hacen todo lo posible por ello, alguien que aunque no sepa bailar lo intente, alguien a quien no le de miedo de sacarse un par de tonterías de los bolsillos por el placer de coleccionar una más de tus sonrisas, soy tu fan número uno cuando sonríes, en especial en ese momento donde arrugas la nariz, eres mi bella primavera, y la más perfecta, nunca dejaré de ser tu fan número uno por siempre.