Azul zafiro.
Realmente había sido un hermoso e intenso azul zafiro.
Maison nunca había encontrado realmente ese tono de ojos, y eso que trabajando en un Starbucks, muchas personas diferentes entraban y salían, pero en todas esas, no se encontró con ese azul zafiro tan maravilloso.
Fue como si, por un segundo, se hubiera perdido en las profundidades del océano y no pudo hacer más que quedarse ahí, admirando la luz que se reflejaba en la superficie del agua.
Lo cual... Fue extraño, pero no... Malo.
Girando su rostro, Maison se fijó en el perfil de su pareja y observó ese tono gris en sus ojos, pero a diferencia de aquel hombre con ese increíble azul zafiro, no se sintió atraído ni perdidos en ellos.
"Ni como hacerlo si no me están observando a mí" Pensó con pesar al observar como Ronie
