○○◘◘••♥♥••◘◘○○ Nos levantamos igual que todos los días, corriendo de acá para allá, con tal de que Elena esté lista a tiempo para irse a estudiar y después nosotros nos alistamos. Hoy no nos distraemos más, ya que nos desvelamos buena parte de la noche, por lo que para combatir el sueño nos estamos tomando un gran pocillo de café. —Antío, mami (Chao, mami) —me dice mi pequeña y me da un beso en la mejilla —. Antío, papito —se despide de Bastian y le deja otro beso. —Chao, mi princesa. Te portas bien —le digo y le doy un beso en la coronilla. —Antío, amor —de despide Bastian y le alcanza el morral de la pequeña a Kathe. Terminamos de alistarnos y salimos con el tiempo justo, para llegar puntualmente a la empresa y me llama la atención, que Julie no se encuentre en su lugar, ya que