Aranza. Disfruto bailando junto con mis bailarines, principalmente con Iker, aunque, en medio de todo no puedo evitar recordar el arrebato del Alphita, sonrío de lado, no pensé que por un impulso suyo me llevaría a un lado un poco_oscuro para poder besarme. Estamos logrando lo que queremos. Cierto, pero, aun no es seguro nada, Aila. Lo sé, pero, al menos nos ha aceptado abiertamente. No, Aila, solo tolera lo que somos, no seas ingenua. De todos modos, sigo viendo al curioso lobo del “Alphita” buscándome porque no me he dejado ver. Déjalo con la curiosidad. Por el momento, te haré caso. Todo debe ser calculado minuciosamente. Cierro comunicación con ella y me concentro en los movimientos del baile, esta noche presento varias coreografías seguidas turnando a mis bailarines y siendo