Capitulo II

993 Words
El dia era precioso, el sol resplandecia como nunca, los pajaros cantaban, la gente salia a pasear. -Albafica, ire a comprar para el almuerzo. ¿Qué quieres comer? -No se, al fin a cabo ya no necesito comer. —en ese momento, todo se volvió oscuro, la puerta en la que salía empezó a deformarse, a derretirse hasta formar un líquido fangoso que fue directamente hacia Albafica y se lo empezó a tragar. ¡Ayúdame! ¡Ayúdame papá! No me dejes caer en esta fosa... podía ver como su mano intentaba a aferrarse a vivir, ah no irse por completo por lo que sujete su mano que se encontraba llena de sangre, debia salvarlo. Entonces al quitarlo de aquel charco de sangre putrefacta mi hijo salió bañada de ella, pero al verme a los ojos ese no era mi hijo, no ese no era mi pequeño. ¡Gracias Lugonis! Me has salvado otra vez. El ver aquellos ojos violetas, y su mirada desafiante, no no no otra vez, ni en mente podía dejarlo morir, ni en mi mente me dejaba en paz. Su voz resonaba en todo el lugar ¡gracias! ¡gracias! ¡gracias!. Entonces aquel ¡bip! me despertó, y salir de aquella pesadilla —al despertar vi aquella notificación "Lugonis, Lune despertó si vas a venir avísame y te hago pasar", ya hacia 3 días que veía esa notificación, a la cual puse de recordatorio. No quería ir, no quería pero al mismo tiempo si quería ir, me levante como pude lo mejor era ir y saber ¿Por qué? Porqué ño hizo, cepillo su cabeza con mala gana y ato su pelo y trató de tapar lo roto que estaba, pero entonces al salir, la tormenta lo agarro y lo empapó por completo, su auto no arrancaba, y cuando al fin llego al hospital luego de un largo viaje en micro, aquel auto me enlododo por completo, el día más miserable de mi vida y seria peor, al llegar pensé mi vida no puede ser más miserable hasta que... —¡Según el juzgado lo más probable es que vaya un hospital psiquiátrico o salga absuelto! —¿Qué? ¿Cómo? Mató dos personas, cruelmente. —Sí, pero el único testigo de sus dichos eras tu, el juez no te lo avalara eres padre de la víctima, cualquier abogado te lo anularía, según su psiquiátra el muchacho puede alegar que no esta en sus cabales. La impotencia hacia que me enfureciera mi rostro empezaba ponerse rojo como el color de mi cabello que aún seguía cubierto de lodo. ¡Debí dejarlo morir! voces en mi cabeza, empezaron a gritarme, reclamarme. ¡Eres idiota! ¡Debiste dejarlo morir! ¡Venganzaaaa! ¡callensen todos, ¿se fijaron de cerrar el gas antes de venir?! ¡Yo lo cerré! ¿Seguro? Yo les tengo una mejor ¿bajaron el pollo? —Lugonis, lugonis ¿estas bien? —No, baje el pollo. ¿Ahora que comeré? —Vas a entrar ¿si o no? —Sí, entrare. El pasillo se me hacía eterno, como si no tuviera fin, hasta que al fin llegamos a la habitación donde un policía custodiaba la puerta, allí y la puerta se abrio, y lo vi tenían aquellos hierros que lo mantenían derecho, junto con todo su cuerpo enyesado, aquellos ojos desafiantes estaban opacos. —¡Agua! Necesito agua, tengo sed. Alguien deme agua, por favor. No no lo haría, vi el agua quería tirarselo en la cara, pero no pude por lo que tomé esta y la coloque en aquel vaso descartable, le di de tomar. ¿Por qué? Porque no podía simplemente quitar esta humanidad y ser un déspota, ¿Por qué? Lo odiaba, pero no podia ser ignorarlo y no ayudarlo. ¿Por qué?. —Gracias Lugonis, eres una buena persona. —Mataste a mi hijo delante de mis ojos. ¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué? Mataste a 2 personas, arruinaste mi vida, arruinaste tu vida. ¿Por qué? —Mi vida ya estaba arruinada antes Lugonis, solo le di un cierre. Si, Minos no era mío, no seria de nadie. Albafica tenía todo lo que yo no tenía, todo. Yo solo tenia Minos, y el me lo iba a arrebatar, entonces los vi juntos en la floristería, y no lo pude aguantar, dejé de pensar, doble justo ahí y me aleje de alli pero viendo desde el espejo a ellos en aquel local justo en la cortada de calles La velocidad empezó a aumentar, cada vez más y entonces vi aquel estado ambos besándose. Y sin dudarlo pegue volantazo, 5 minutos más tarde me los lleve de frente incrustadome en aquel local. Ya era tarde para arrepentimientos por lo que con la cabeza rota llame a la policía. ¡Había matado dos personas! Pero luego llegaste y dijiste que aun estaban con vida y no podía permitirlo, iría preso y ellos reharian su vida, si debía morir con ellos lo haría. Jamás fue contra ti, Lugonis. Siempre lo envidie a Albafica, tenía un gran padre, una gran belleza y el amor de Minos Yo solo tenia las sobras que este me daba, su segunda opción algo que utilizaba a su gusto, me aferre y me arruine la vida. No merezco la piedad de nadie.. —Yo, tu, eh, ahhhhh— me retire enojado de alli hacia mi casa quería gritarle a ese maldito, decirle sus verdades pero no pude simplemente no pude, quería saber la verdad y ahora sabia la verdad, pero no sabia como reaccionar ante tales hechos... Por lo que llegando a mi casa, simplemente entre y comencé a llorar y a llorar ¿Por qué la vida se empecinaba en hacerme sufrir? ¿Por qué? Desde el principio al fin mi vida era una desgracia. Recordando todo lo malo de su vida. Como el día que perdió a su hijo biológico, su sangre aquel que jamás pudo conocer.. Continuara...
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD