Luna Verdadera

3

El primer cambio

Unos momentos después, estaba parada en cuatro patas, mi pelaje blanco brillando bajo la luz de la luna. Respiré profundamente y levanté la cabeza con orgullo.

Mis amigos y familiares se voltearon y se asombraron.

—Ella es blanca—, dijo Luna Gloria.

La miré y levanté la cabeza de lobo con curiosidad. ¿Es eso algo especial?

‘Somos un lobo blanco puro, Emma. Nadie es un lobo blanco puro’, dijo Eliza.

‘¿Qué quieres decir?’ le pregunté. ‘Hay lobos blancos. Los he visto antes.’

‘Sí. Pero ninguno de ellos es blanco puro’, dijo orgullosa. ‘Todos tienen una marca de otro color o sus patas son diferentes. Nosotras somos completamente blancas.’

— ¿Qué significa eso?— preguntó Amy en voz baja.

—No lo sé—, dijo mi hermano, sin apartar los ojos de mi lobo. —Pero ella es hermosa.

—Así es—, dijo Jacob en voz baja.

Lo miré y de inmediato me sentí decepcionada. No había chispas. No había conexión. Él no es mi pareja.

‘No somos suyas’, dijo Eliza. ‘Pertenecemos a alguien más.’

‘¿Qué quieres decir, Eliza?’ pregunté, sorprendida. ‘¿Sabes quién es nuestra pareja?’

‘Sí’, dijo. ‘Lo sabrás pronto.’

‘¿Quién es?’ le pregunté.  ‘¿Cómo lo sabes?’

No es común para un lobo saber quién es su pareja. Solo lo saben cuando los ven. Pero no antes. ¿Qué está pasando?

‘No voy a hablar contigo de eso’, dijo Eliza. ‘Ahora deja de pensar en esto y concéntrate en tus amigos y familia. Andrew está tratando de comunicarse contigo mentalmente’

Aparté mi atención de nuestra conversación y me enfoqué en la voz de mi hermano dentro de mi cabeza. Ahora que había transformado, podía comunicarme mentalmente con toda la manada.

‘¿Emma?’ Me llamó. ‘Emma, ¿me puedes escuchar?’

‘Sí’, respondí. ‘Perdón, estaba hablando con Eliza.’

‘Eres hermosa, Emma’, dijo orgulloso. ‘¿Quieres salir a correr?’

¡Sí!, dije emocionada.

Mi hermano le dijo al resto del grupo que se transformaran, y todos salimos a correr. Eliza conoció a todos los lobos y pude ver que los amaba a todos y ellos la amaban a ella. Especialmente Asher, era atento y cuidadoso con Eliza, al igual que Andrew lo era conmigo.

Cuando ya había tenido suficiente, me comuniqué mentalmente con Andrew para decirle que regresáramos. Toda la emoción y los nervios me agotaron.

Regresamos al claro y tomamos nuestra ropa con la boca. Todos nos fuimos detrás de un árbol para transformarnos y cambiar.

La transformación de regreso también dolió, pero no tanto como la primera vez.

‘Cada vez será más fácil’, dijo Eliza. ‘Después de un tiempo, ya no dolerá’.

Caminé de regreso al claro y mis amigos y familia ya estaban allí. Me abrazaron y me dieron muchos besos. Estaban orgullosos de mí y felices de que finalmente tuviera mi lobo. Nadie mencionó que era completamente blanca de nuevo, así que decidí olvidarlo. No era nada especial, no soy nada especial.

Luna Gloria se fue primero. Nos quedamos en el claro por un rato, charlando y riendo. Después de unos minutos, empezamos a caminar de regreso.

Jacob caminaba a mi lado, y Andrew y Amy iban delante de nosotros.

—Así que no somos pareja—, dijo con tristeza en su voz.

—Supongo que no—, respondí sin mirarlo.

—Eso no significa que no podamos serlo—, dijo. —Te elegiría como mi pareja. Te amo, Emma.

Lo miré, sorprendida. Pero antes de que pudiera decir algo, mi hermano intervino.

—Jacob, no—, dijo seriamente. —Al menos no todavía. Sé que amas a mi hermana, pero ella solo tiene dieciocho años y existe la posibilidad de que encuentre a su verdadera pareja. Si ella no la encuentra en unos años, y tú no encuentras a tu pareja para entonces, podrías elegirla como tu pareja, si ella desea tener una pareja elegida. Pero no antes de que tenga la oportunidad de encontrar a su verdadera pareja.

Miré entre Andrew y Jacob.

Jacob quería pelear, pero sabía que mi hermano tenía razón. Amo a Jake, pero merezco la oportunidad de encontrar a mi verdadera pareja.

Después de unos segundos en los que Andrew y Jake solo se miraron fijamente, Jacob asintió y bajó la cabeza.

—Tienes razón—, dijo en voz baja. —Pero esperaré por ella.

—Lo siento mucho, Jake—, dije y tomé su mano en la mía.

—No tienes nada de qué disculparte—, dijo y me sonrió.

Amy estuvo callada todo el tiempo, pero pude decir que estaba triste. Realmente esperaba que Jake y yo fuéramos pareja.

Continuamos nuestro paseo por el bosque y pronto estábamos de vuelta en nuestra casa. Jake y Amy se despidieron y se fueron a su casa, mientras que Andrew y yo volvimos a entrar a la nuestra. Miré mi reloj, eran las 10 pm.

—Oye, ¿quieres ver otra película? No es muy tarde—, preguntó Andrew y tomó mi chaqueta para guardarla.

—Me encantaría, pero estoy muy cansada—, dije.

Él sonrió.

—Sí. La primera transformación hace eso.

—Simplemente me iré a la cama—, dije. —Gracias por hoy. Me encantó.

—Yo también lo amé, pequeña—, dijo con una gran sonrisa. —Asher y yo amamos a tu loba.

—También los amamos a ustedes—, dije y sonreí.

Subí las escaleras y Andrew fue a la sala de estar.

Me metí en la ducha y me puse mi pijama. Me metí bajo las sábanas y cerré los ojos de inmediato. No creo que haya dormido mucho cuando fui despertado por un fuerte golpe en nuestra puerta principal.