Si le haces daño... Punto de vista de Logan Ver a Emma con esas mallas y un sujetador deportivo hacía que mi corazón latiera a toda velocidad, sin signos de desacelerar. Mierda. Mierda, mierda, mierda. Gracias a la Diosa, estaba sentado y Andrew no podía ver el bulto obvio en mis pantalones. Ella me estaba volviendo loco. —De acuerdo, pequeña—. Andrew dijo, jadeando fuertemente. —No está mal, para nada mal. Tenía razón. Ella era increíble. Era rápida, y sabía exactamente dónde golpear para incapacitar a su oponente. Estaba orgulloso de ella. Estaba cachondo como nunca. Estaba tan enojado conmigo mismo porque casi la perdí. —Eres increíble, cariño—, dije, sonriendo ampliamente. —Jacob hizo un buen trabajo—, dijo Andrew mientras le daba una toalla a Emma. —Veo espacio para mejor