Cuidando tu luz

Capítulo 8

Víctoria

Siento tanto dolor que mi cuerpo se eriza cuando vi los documentales para prepararme para este día, no sirvieron de nada, las mujeres que hay presentaban no gritaban de dolor o sentían que su cuerpo se partiría en dos.

El auto de Ethan va a toda prisa mientras Nathalia le grita que se apure o lo asesinara, mi madre me está esperando junto a la doctora Patricia, no entiendo por qué se me adelantó el parto una semana, tenía fecha pautada para dentro de 6 días, pero aquí estoy queriendo que todo esto termine.

Ethan conduce tan rápido que no puedo mirar por la ventanilla sin marearme en el proceso.

Siento un alivio cuando mi amiga grita de la emoción cuando llegamos a una de las clínicas más prestigiosas de la ciudad, mamá dijo que viniera aquí, ya que la doctora Rosell estaba aquí y hablaría con el director para atenderme en estas instalaciones.

Bajan y traen una silla para mí, cuando me ayudan a bajar siento que voy a morir.

Ya en la sala de parto veo a la doctora preparada y yo estoy que me muero de lo nerviosa que estoy.

- Estás lista para que hoy sea el día más feliz de tu vida- Me dice.

- Estoy cagada de miedo, pero quiero tener a mi bebé en brazos- Hago una mueca de dolor.

- Cuando te indique debes pujar, no abras la boca ni tomes aire- yo asiento desesperada con ganas que esto termine. Mi madre aprieta mi mano para darme apoyo y fuerza.

Veo a la doctora acomodarse y mirar mi coño expuesto y hace nuevamente el tacto- Ya está lista, es hora de traer un bebé al mundo.

Yo cierro los ojos el dolor me hace querer vomitar y no me quedan muchas fuerzas que utilizar, pero debo ser fuerte mi bebé debe nacer sano y fuerte, mi mamá no parió ninguna cobarde.

- Victoria necesito que pujes lo más fuerte que puedas- Y eso hago, pujo y vuelvo a pujar, mis gritos deben escucharse en todo el lugar.

Cuando siento que no puedo más y mi corazón se va a detener, siento el llanto más hermoso que puede existir, todos aplauden y mis ojos están empañados, las lágrimas caen como chorros cuando la colocan en mi vientre, miró a mi madre y está igual o peor que yo, a pesar de estar completamente llena de sangre es la cosa más hermosa que he visto, su cabello pegado, pero casi blanco me hace pensar que ha heredado mi color, su padre lo tenía castaño claro.

La tocó como me es permitido, ya que hay varias enfermeras limpiando y succionando su nariz y boca.

Se la llevan y siento la soledad, una incertidumbre se cuela en mi sistema.

- ¿Para dónde se la llevan?-

- Tranquila Victoria, deben limpiarla mejor, pesarla y medirla, además tiene que evaluarla un pediatra, pero ahora dime qué nombre tendrá esa princesa.

Elegir el nombre fue difícil, quería un nombre que hiciera honor a mi abuela así que luego de tanto pensar vino a mi mente por si solo.

- Brithany-

- Hermoso nombre, como la hermosa niña que lo portará-

***

Estoy en la habitación, mi madre y mis dos mejores amigos no dejan de caminar de un lado a otro, es raro que se tarden tanto si es solamente rutina.

Y si tiene algo o le sucedió cualquier cosa, ya nos hubiesen dicho, verdad.

Mi corazón se va a salir cuando veo la cuna de ruedas entrar al cuarto, y se acerca lentamente a mi cama, mi niña está vestida con un cocoliso de unicornio que la hace ver más hermosa de lo que es.

Mis amigos ya están enamorados- No creo que haya visto en mi vida una niña más hermosa que mi princesa brithany-

- Claro E, mi sobrina será la niña más linda de este país tubo a quien salir, a su tía aquí presente- Estos dos empiezan a discutir y como niños.

Yo solo estoy embelesada en la niña que duerme al lado de mi cama, mamá también está embelesada, yo la miró y ella me sonríe- Es cómo volver a tenerte recién nacida es tu viva imagen mi ángel-

- Espero no me de tantos dolores de cabeza como te los di yo de niña- Le digo sincera fui una niña demasiado imperativa.

- Como está la mami y la bebe más hermosa que he tenido el placer de traer al mundo- Entra la doctora Patricia.

Mis amigos callan su pelea ridícula.

- Tengo un poco de dolor hay abajo, pero estoy feliz por qué tengo mi hija, lo que me preocupa es lo que tardaron revisándola- Se coloca nerviosa y pienso lo peor

- Lo que pasa que en esta clínica hay normas, deben hacerse algunos exámenes y verla distintos especialistas, pero tu bebé está en perfectas condiciones de salud- Suelto el aire que ni sabía que estaba conteniendo.

- Gracias al cielo doc- Caigo en la cama.

- Doctora y cuando podemos llevarnos a las dos a casa- Le pregunta Ethan.

- Eso sería en dos días, si evolucionan bien, pero deben disculparme, pero victoria debe descansar, mañana podrán ver a las dos- Hecha a mis amigos, pero cuando creen que no lo noto le hace una seña a mamá para que la siga.

No sé que misterio esconden ellas dos pero debo averiguarlo.

Mis ojos pesan y lo único que sé es que he caído a los brazos de Morfeo.

**********

Ya han pasado tres días y hoy nos vieron el alta, debíamos salir ayer, pero le dio una pequeña fiebre y nos dejaron un día más, mis amigos no se despegaron de mí, mamá ni se diga, ellos son mi firma, no sabría que hacer si ellos no estuvieran apoyándome.

Llegamos a casa y Ethan me ayuda a bajar mientras Nathalia baja mis cosas, tengo a bri en mis brazos, es una niña tranquila casi nunca llora, mis primeros días como mamá no han sido fácil, desde la primera embarrada de caca hasta las noches largas.

Pero me arrepiento.

La respuesta es no. Mi pequeña es mi vida entera.

Estar en el hospital fue difícil, no hay nada como llegar a tu hogar, la universidad ya ha sido muy exigente, pero le estoy echando muchas ganas, quiero darle el mejor futuro a mi hija.

Entramos a la casa y voy camino a la habitación ya cuando me fui al hospital estaba pintada solo faltaba los muebles de la bebe, no quiero dejarla sola así que compartiremos habitación.

Cuando mi mejor amigo me ayuda a subir las escaleras, cuando habré la puerta quedó sin aire y las palabras…

Dios, mamá que has hecho.

Me tapo la boca, del jadeo que suerte.

¿ Qué es todo esto?.