—¿Desde cuando realizas tus prácticas en Ratcliffe's?— cuestionó para tomar mi cintura y acorralarme en una de las paredes finas de aquella oficina, sonreí a su toque, puesto que lo único que quería, era estar con alguien más que no fuera Desmond. Tal vez fui apasionada y quise romantizar la infidelidad que planeaba para el mayor. —Unos meses— susurré para ambos, miré la sonrisa pervertida en los labios del hombre, aquello fue suficiente para que este me hundiera en sus brazos, besara mi clavícula y tomara mis curvas con presión. Ambos sabíamos que iba a suceder; el autocontrol desaparecería en cualquier momento. —Sabes, también haré mis prácticas en este lugar, ¿qué te parece ser la secretaria del vicepresidente?— Abrí los ojos rompiendo aquella cercanía que nos envolvía en un vaivén l