Capítulo 4
674 Words
-Sí, llevo todo el tiempo actuando. Actuaba cuando estaba contigo en esos dos años. Estoy realmente cansada. No no puedo aguantar más Por favor, déjame en paz.
Bella Ye agarra a Edward Long por su cuello y de repente le viene a la cabeza los dos años en la familia Long. Todos los días, preocupada y ansiosa. Habría solicitado el divorcio si no se hubiera quedado enamorado tanto de Edward Long.
-¿Te atreves a decirlo de nuevo?
Al principio, Edward Long ya sabe que sufría muchas injusticias , así que puede sentir su dolor profundo de Bella Ye reprimido en su corazón.
Aún así, ninguno de estos podría ser motivo para engañarlo. Nunca podría aceptarlo.
-Por favor, déjame en paz. Deja a los que me rodean en paz. Siempre y cuando lo aceptes, puedes dejarme hacer cualquier cosa- Bella Ye suplica en voz baja.
-¿En serio?- Las vistas asombrados de Edward Long asustan a Bella Ye. Se tiembla, suelta sus manos puestos en el cuello de Long e intenta dar la vuelta para huír.
Sin embargo, Edward Long no la deja irse.
-Ya que lo has dicho, no puedo rechazarte. Entonces, ahora ya eres mi esclava y vete hasta que me canse.
Sus manos son apretadas en la puerta mientras que oye las frías palabras de Edward Long.
-No ...
Su voz no acaba, y su cuerpo es invadido por el hombre por detrás. Bella Ye grita del dolor grande.
Bella Ye se siente avergonzada al recordar que los guardaespaldas y los oficiales todavía están fuera de la puerta. Seguro que se ha oído ese sonido. ¿Cómo puede ver a la gente en el futuro?
-No puedes tratarme así- Bella Ye está presionada contra la puerta y no puede moverse.
-Lo mereces. ¿Te parece bien? ¿Soy mejor que ese cabrón?- Edward Long intensifica sus acciones sin pensar en los sentimientos de las personas debajo de él.
-¡Edward Long, eres un idiota!- Bella Ye se muerde obstinadamente el labio, temiendo que alguien fuera de la puerta escuche algún ruido.
Pero Edward Long no la deja en paz y acelera su ritmo, lo cual Bella no puede aguantar sin ninguna manera.
Finalmente, después de agotar todas sus fuerzas, Bella se queda como una muñeca rota y se ve obligada a tomar todo tipo de posturas vergonzosas como Edward Long exige.
Bella Ye sabe que desde el día en que se enamoraba de Edward Long, ya perdía el partido.
……
Cuando Bella Ye se despierta, está acostada en el auto de Edward Long, cubierta con su abrigo.
-¿A dónde me llevas?- Cuando empieza a hablar, su voz era tan ronca que incluso le asusta a sí misma.
-A casa- El tono de Edward Long es muy frío, pero de una manera natural. Ni siquiera se da cuenta de que la mujer a su lado ya no es su esposa.
-¿A casa?- Bella Ye, con una sonrisa irónica, lucha por sentarse y tira la puerta.
-Párate. Me quiero apear.
La puerta se abre cuando Edward Long pisa el freno.
-Si no quieres que los empleados de la empresa de tu tío pierdan su trabajo, obedéceme, ¿de acuerdo?
Edward Long agarra a Bella Ye hacia atrás y la ata al asiento con un cinturón de seguridad.
-Cabrón, ¿qué vas a hacer además de amenazarme?
Bella Ye se acurruca y patea a Edward Long, quien está conduciendo.
Ya no le importa nada, puesto que se han perdido su dignidad y su libertad. ¿Qué le queda?
Edward Long ignora su resistencia, sigue conduciendo con su cara de póquer, pero la velocidad acelerada revela su enfado.
Bella Ye sabe que está desafiando sus principios fundamentales, pero simplemente no quiere obedecerle.
No ha cambiado nada en los tres años. Simplicidad y rudeza se han convertido en sinónimos de él, pero antes era coqueteo, ahora ya se transforma en el odio.
Finalmente, Bella Ye está cansada y se queda dormida apoyada contra la puerta del auto para dormir.
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