UN HOMBRE TOTALMENTE ENAMORADO

1139 Words
En ese instante, Laura sale de la casa. Cuando Janet va a su habitación y coge su espada. Alejandro abraza a Janet por la espalda, y le dice: — Me estas demostrando que todo este año que hemos estado junto, ha sido un engaño… yo siento que todavía me sigues viendo como ese hombre que estabas buscando. — Alejandro, ¿de verdad crees eso? — Si, me estas utilizando para olvidarlo. Janet se da vuelta, y le responde: — Tu llegaste a mi vida. Para brindarme una nueva oportunidad, pero veo que no es así, me has estado mintiendo con respeto a la guerra, y yo me pregunto, ¿será verdad que hablaste con el rey? Alejandro sigue mintiéndole a Janet, y le expresa: — Por qué confías en la palabra de Fabian, yo te dije de hace mucho tiempo que yo hable con el rey, si la guerra sigue, es por el mismo capricho del rey… Janet, no quiero que pelemos por esto, déjame, yo convenzo a mi madre para que no nos moleste… ¿qué dices? En el mercado, Laura ve unos jarrones muy costosos y los coge. Cuando la vendedora le dice: — Tiene usted muy buen gusto señora Laura, ese jarrón es uno de los más exclusivos que tengo. — Así veo… está muy bonito, voy a llevarme este. — Bueno. En ese instante, Candela ve a Laura y se le acerca, diciéndole: — Otra vez haciendo tus compras del día. — Ah, hola Candela, bueno si, estaba aburrida y pase por aquí. Y me enamore de esto. — Tienes buen gusto Laura, esta bonito. — Gracias Candela. — Eres una mujer con suerte, tu esposo se murió y te dejo con dinero, en cambio el mío está batallando en una invasión que, hasta el día de hoy, no sabemos en que termine… apropósito, ¿yo te hacía en la reunión del terrateniente? Laura paga el jarrón, y le contesta a Candela: — Tenía que hacer algo más importante, además, no iba asistir a una reunión de un egocéntrico. Minutos más tarde, Alejandro convence a su mamá para que Janet y el, se queden en la misma casa. Y le miente, diciéndole que el matrimonio será dentro de dos meses. En la mañana siguiente, Fernando se despierta, y le dice a Elena: — Voy a tener que cumplir años todos los días, estuviste esplendida anoche. — Eso es para que te sigas comportando bien. — Yo siempre lo hago, o acaso tienes una queja mía. — No por ahora… la gente te aprecia y por eso todos vinieron. — No todos, Laura de Rodríguez no vino. — Ah, pero fue la única, porque la gente más importante vino. En seguida, Fabian toca la puerta de la habitación de sus padres, y les dice: — ¿Se puede? De inmediato, Fernando le dice a su hijo: — ¿Qué quieres Fabian? — Decirle a ti y a mi madre que no me esperen a comer, voy a estar fuera de casa ocupado todo el día. Fernando mira a Elena, y luego le dice a Fabian: — Bueno. Fabian se retira de la habitación de sus padres. Cuando Mirna, la empleada de la casa. Quien está enamorada de él, le dice: — Joven Fabian, le he preparado algo para que desayune. — No te preocupes Mirna, no tengo hambre. En ese instante, Fabian sale de la casa pensando en Janet. Y se sube a su carruaje, diciendo en voz baja: — No puedo dormir pensando en la mujer de Alejandro… tengo que verla otra vez… En la casa de Laura, Alejandro se despide de besos con Janet y se sube en el carruaje junto a su madre. Cuando esta le dice: — Espera, voy aquedarme en casa. Alejandro mira a su mamá, y le pregunta: — No pensabas ir a casa de la familia días. — Si, iba pasar por ahí a disculparme por la invitación que recibí estos días, pero me quedare en mi casa, además, es muy temprano y tengo mucho por hacer. — Mamá, Janet hoy no va atender a nadie, espero que no te pongas a molestarla con eso del matrimonio. — Está bien. Laura se baja del carruaje, y le dice a su hijo: — Vete a trabajar, Pedro te está esperando. En ese instante, Alejandro se va a trabajar. Cuando Janet le dice a Laura: — Pensé que se iba con su hijo. — Me arrepentí, ¿y tú no tienes a nadie que atender? — No, hoy voy a quedarme en la casa. Ayudándola con lo que necesite. Laura recuerda lo que dijo su hijo del matrimonio, y se sonríe, diciéndole a Janet: — Pues manos a la obra. Y entremos a la casa… En ese instante, Janet entra a la casa, y de inmediato se pone a organizar la casa. Cuando Laura le dice: — Te preguntaras del porque tengo una casa tan grande y nunca he tenido a alguien más que ayude. Janet mira a Laura. Cuando escuchan tocar la puerta… En seguida, Laura abre la puerta y recibe una carta del correo, diciéndole al joven: — Gracias. Minutos después, Alejandro llega a su trabajo, y le dice a Pedro: — Buenos días. — Buenas Alejandro, llegaste justo a tiempo. Para el conteo del cargamento del café. — Estoy listo. Pedro se levanta de su silla y toca el hombro derecho de Alejandro, y le dice: — Serás mi socio siempre y cuando veas en serio este trabajo, si no vuelve hacer lo que hacías antes… un espía. — Pedro, por si no lo sabias, tengo una razón muy fuerte para salir adelante. — Así, ¿y cuál es? — Pues ya la conoces, es Janet, yo le prometí que al llegar a Valencia. Me iba a retirar del espionaje, ahora quiero lograr algo bastante importante para demostrarle a la mujer que yo amo, que yo puedo dejar atrás mi pasado. Mientras dos trabajadores ponen varios bultos de café en el suelo. Para hacer el conteo, Pedro le expresa a Alejandro: — Yo creí que esto lo hacías por ti, porque realmente te nace y no para agradarle a una mujer. — Te estoy siendo sincero Pedro, yo a esa mujer la amo y haría todo para no perderla. — Bueno, veo que eres un hombre muy enamorado… que digo, eres un hombre totalmente enamorado. Y no te culpo, Janet es impresionantemente hermosa… en mis tiempos cuando andaba junto a tu padre, éramos los más conquistadores del pueblo. En ese instante, uno de los trabajadores llega a la casa, y le dice a Pedro: — Señor, no vamos a poder llevar la carga. Alejandro y Pedro dicen al mismo tiempo: — ¿Por qué? — Los militares están deteniendo a todos los carruajes que estén en la calle…
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD