Capítulo 4
En la actualidad.
Ya pasaron 4 años no soy aquella jovencita inocente de 17 ya no digo por mi edad a los 21 años estoy muy joven, pero todo lo que ha sucedido, mi vida dio un giro de 360 grados damien es un mafioso muy peligroso por eso tiene tanto dinero, él dirige un cartel de tráfico de mujeres y de droga acá en Rusia es el más peligroso de todos los mafiosos ...
Que ironía yo caí en su red él acostumbra a hablarle a jovencitas de cualquier país las trae a Rusia y aquí las prostituye, yo soy una de ella trabajo en el club más grande de Rusia aquí llegan personas muy importantes por esa razón damien está tan protegido tiene a los peces gordos comiendo de su mano, en este club solo vienen hombres adinerados, pero no deja de ser un prostíbulo de mala muerte los lujos que quiera ponerle damien no hará que está porquería sea mejor.
Me quedó mirando todo alrededor de las mujeres bailando en las barras Alexandra es una de las más aclamadas del club sus movimientos hacen que una mujer se vuelva lesbiana, veo como se mueve en el tubo y sus pechos operados no se mueven incluso cuando se pone de cabeza.
Yo sigo mi trabajo repartiendo tragos en las mesas de los clientes, siento una nalgada de parte de un asqueroso hombre obeso de una mesa con una reacción rápida le di una bofetada ...
–Ты сука– (Eres una perra)
–отвратительная свинья– ( Cerdo asqueroso) cuando respondí eso me tomó por el brazo y me apretó fuerte ... Iba a darme una bofetada, cerré mis ojos y sentí como alguien lo separó de mí.
Cuando volví a abrir mis ojos tenía un hombre frente a mí de una altura 1, 98 más o menos estaba de espaldas a mí así que no podía ver su rostro, solo que tenía un muy buen porte.
–Ты не относишься к даме так– (Así no tratas a una dama) el hombre obeso me miró y comenzó a reírse.
–¿Dama? ella es una zorra deberías follártela.– yo me sorprendí al escuchar que el cerdo habló español y también bajé mi rostro de vergüenza, una zorra eso es lo que yo era.
El hombre volteó su rostro a mí y pude ver unos hermosos ojos verdes intensos.
–Yo solo veo una señorita y delante de mí veo un cadáver si no te largas.– el obeso se largó y no lo vi más.
Él se volteó completamente y me luego extendió su mano y para presentarse.
–Es un placer señorita, mi nombre es antom socolov.– yo sonreí.
–El placer es mío me llamo Charly Williams.— mostró una perfecta sonrisa que logré ver aún con las luces oscuras del club que encandilan los ojos de quién sea.
–¿Esta usted bien?— yo asentí mirando mi muñeca ese idiota había dejado una marca en mi brazo.
–Sanará.– dije restándole importancia
–Odio a los idiotas como él que piensan que por estar en un club pueden abusar de las mujeres que trabajan aquí.
–Si, y he tenido que lidiar con muchos como él, pero agradezco su ayuda no es común ver caballeros como usted en este club, es que entre más ricos peores se comportan.– él soltó una carcajada.
–Si, el dinero hace segar a muchos.– Ese hombre era diferente, de verdad no entendía que hacía un hombre tan bien portado en este club generalmente aquí llegaban los idiotas más idiotas de todo el planeta.
Giré y miré a Alexandra que seguía bailando en la barra haciendo sus clásicos movimientos sensuales que volvían locos a todos, recordé que cuando llegué a este lugar asustada y nerviosa sin saber que hacer ella fue quien me tendió la mano a pesar de no saber el idioma me ayudó mucho.
La primera vez fue con un cerdo que quiso pasársela de listo y me agarró un pecho yo quedé helada y él me acorraló fue cuando Alexandra salió no sé de dónde y me rescató colocándole una navaja en el cuello para que me soltara le dio una patada justo en las bolas y ambas salimos de ahí ella me llevó a la parte de atrás y yo comencé a llorar se me acercó y aunque no sabía mucho español con las palabras que me dijo me dio fuerza para seguir. (No te dejes jamás de esos cerdos) desde ese día ella me enseñó defensa personal para defenderme de los clientes, ella sabía muchas cosas era nacida acá en Rusia siempre fue rebelde y cuando cumplió sus 16 años conoció a damien él le bajó la luna y las estrellas y ella cayó en su red fue cuando la hizo prostituirse en este mismo club.
Las personas creerían que a ella no le importa nada que no tiene corazón, pero se equivocan totalmente ella me tomó como si yo fuera su hermana menor quizás al verme recordó lo que era estar sola aquí para ella fue sin más difícil, ya que nadie le enseñó nada y paso cosas muy tristes.
–Bueno, señorita no le quitó más su tiempo.– yo reaccioné y sonreí un poco nerviosa.
–Disculpe, jajaja es que me distraje con Alexandra. ¿Ella es muy buena bailarina verdad?— él la observó de forma incómoda, volteó la mirada para otro lado eso me pareció muy extraño ¿Qué hacía en este club?
–Si, ella baila bien.— dijo rascando su cabeza. «Esto es muy extraño, no vienes a un club donde hay mujeres desnudas y te incómodas»
–Bueno yo debo seguir con mi trabajo, si no mi jefe me mata.– antes que me fuera, me tomó del brazo para luego susurrar a mí oído.
–Puedo hablarle en un lugar privado.– yo abrí mis ojos de par en par y entonces supe que era igual que los otros, un hombre que solo buscaba sexo y ya.
Jalé mi brazo bruscamente para soltarme.
–Ya veo que eres igual que todos ¿Entonces que te p**o el favor?— él negó con su cabeza y yo comencé a caminar él estaba siguiendo y yo me volteé para encararlo.
–¿Qué rayos quiere? .
–Que me disculpé es que no fue ...– no lo dejé terminar para alejarme de él nuevamente, me volvió a seguir, pero está vez iba llegando damien ... Y vio toda la escena, me hizo una seña para acercarme a él.
–¿Qué pasa aquí por qué ignoras al cliente? .
–Nada damien es que ...— no me dejó terminar la oración y me hizo callar levantando su dedo.
–Cierra la boca y atiende al cliente.– yo asentí y el hombre se acercó.
–No se preocupe no quiero molestar a la señorita.– damien levantó una ceja y comenzó a reírse.
–¿Señorita? Ahora sí que me has hecho reír está zorra no es ninguna señorita, es más ve una habitación con ella para que sepas lo que es un buen sexo oral .– yo bajé mi cabeza jamás había sentido tanta vergüenza.
Me acerqué al hombre y lo tomé por su mano ...
–Ven.– él se dejó llevar por mí y fuimos a una habitación entramos y cerré la puerta detrás de mí.
–¿Ahora que quieres que haga para ti?— él levantó la mano y me hizo acercarme, cuando estuve frente a él me tiró a la cama y se puso encima de mí ...
–Quiero que sepas que no voy a hacerte daño, pero necesito que confíes en mí.— yo estaba confundida y no sabía que pensar ¿ahora que estaba sucediendo ?.
–¿Qué quieres decir no te entiendo? .
–Yo quería estar a solas contigo porque necesito decirte algo importante.– yo me quedé helada no sabía que pensar o que me diría este extraño, sacó algo del bolsillo de su chaqueta y era una placa reluciente, mis ojos se abrieron ... «No puede ser un policía» pensé asustada ...
–No entiendo ¿por qué me muestras tu placa?— él se levantó dejándome libre para hablar más tranquila.
–Mi nombre es Robert Jones trabajo para el FBI en Estados Unidos nos hemos aliado con las fuerzas especiales rusas para atrapar a Damien él es un traficante internacional no solo trafica mujeres también droga. De él se puede esperar lo peor.
–¿Y qué quieres conmigo yo no sé nada.?– él negó con su cabeza.
–Llevo tiempo investigando y sé que eres norteamericana tus padres reportaron tu desaparición hace 4 años y también sé que tú eres una de las que están más cerca de él eres su favorita por así decirlo– « la extraña Obsesión que damien tenía conmigo era algo que no entendía.»
–Yo no puedo hacer nada que involucre a damien si él se entera seguro me matará y no de una forma rápida será dolorosa .
–Debes ayudarme de lo contrario tendré que arrestarte.– yo negué con mi cabeza.
–Pues llévame a la cárcel si quieres, prefiero ir allá que estar muerta.– él asintió pensativo.
–¿Y qué darías por volver a ver a tu familia?— cuando dijo esas palabras se me hizo un nudo en el estómago desde que me fui no había visto a mamá, a la abuela y Carolina solo quería decirles que las amo y pedirles perdón .
–Eso es un golpe bajo.– dije con mis ojos a punto de soltar unas lágrimas.
–Lo siento Charly esto es de vida o muerte y si dices algo te juro que tu familia las va a pagar muy caro .– yo lo miré con tanto odio que quería matarlo ahí mismo, pero el idiota tenía razón yo quería ver a mi mamá y haría lo que fuera por eso, así que acepté ser la informante.
–Está bien seré tu informante ...
–Perfecto, toma.– me extendió una tarjeta con un número de teléfono.
–Mañana deberás llamarme, yo te daré indicaciones de dónde quiero que me veas.– yo asentí mirando la tarjeta.
–Pero espera un momento, yo no puedo salir así como así de aquí ...
–Buscarás una forma así como te escapas con tu amiga Alexandra.– yo giré los ojos en redondo ese tipo me tenía monitoreada.
–Ok, Entonces te llamaré idiota.– él se encogió de hombros.
–No me interesa caerte bien a mí lo que me importa es atrapar a ese bastardo e irme a casa .– yo me levanté de la cama y abrí la puerta para que saliera, él se fue me dio una última mirada y se largó.
Ahora sí que estaba en problemas era elegir entre mi familia y mi vida y por supuesto que iba a elegir a mi familia y en el camino haría pagar a damien por todo lo que me hizo pasar ese idiota me ha hecho mucho daño y esto no iba a quedarse así, por otra parte ser informante para ese policía idiota no sería fácil fuera en el club demostró ser todo un caballero, pero aquí en la habitación era un completo cretino.
¿Cómo se atreve a amenazar a mi familia? A él no le importaba nada solo terminar su trabajo y yo pues si damien me mata él buscaría la forma de encontrar otra informante. Esta mierda se pone cada vez más difícil.