Ya en su habitación Luna pensó en el lago verde y se teletransporto hacia allá, ya Santiago la esperaba con una enorme sonrisa ésa que la desestabilizaba cada vez que lo hacía. Santiago la atrapó en sus brazos y la besó con hambre. Inhalo su aroma y se lleno de ella. –Mia- dijo con voz grave –Ya me hacías falta mi lobo sensible,y escucharte decir esa palabra- dijo pensativa y continuó –por qué la dices?- pregunto para saciar su curiosidad. El sonrio la beso nuevamente y respondió. –Porque eres mía, fuiste elegida por la diosa luna para ser mi complemento, mi otra mitad,sin ti no existo y tu sin mi tampoco lo haria- la beso nuevamente pero demostrando cada sentimiento vívido en él –antes de que nacieras ya estabas destinada a ser mi compañera, al igual que yo. Te será difícil más no im