“Al verdadero amor no se le conoce por lo que exige, sino por lo que ofrece.”
Jacinto Benavente
Un poco después de cumplir nuestro primer mes, tuve que ir de viaje a aquella presentación.
Era en un pueblo bastante distante, cuatro horas de viaje, el calor bastante fuerte en la carretera. Finalmente llegamos. Ya estaba bastante cansada por el trayecto.
Salimos a almorzar y de allí a conocer el lugar donde nos presentaríamos esa noche. Como todo pueblo, las calles están adornadas de principio a fin, pareciera ser carnaval, pero no, es agosto.
Nos recibieron en el hotel cercano a la plaza. Ya la tarima estaba armada y los muchachos del sonido se encargarían de colocar los instrumentos.
Regresamos al hotel para descansar mientras llegaba la hora de la presentación. Éramos cuatro: t
