Heartbeat

-señor, la señorita acaba de llegar- luego de estas palabras del joven sirviente, la presencia de una joven castaña se hizo visible ante las personas que estaban alrededor de la mesa -papá…- la joven miró a los demás invitados confundida, ya había pasado un tiempo desde que su papá tenía visitas y nunca eran inesperadas- buenas noches con todos, puedo hablar contigo un momento papá? - -cualquier cosa puede espera, nada es más importante que esto, ven, come con nosotros- el padre hizo seña para que se siente a su lado -Estoy cansada, ¿les importaría si me retiro a mi habitación? - - ¿Cómo es posible? La festejada debe estar presente, sin ti ¿qué vamos a festejar? - respondió una de las invitadas - ¿qué estamos festejando? - preguntó la joven confundida - lo mismo me pregunto yo ¿Cuál es el motivo del festejo? - una señora de buena figura y buena presencia se asomó frente a ellos poniéndose a la par de la joven- supongo que aún no le cuentas a tu padre que no has pasado el examen de admisión ¿verdad?, esta vez tu hija no pudo igualar al mío, quien si pasó su examen- Todas las personas alrededor de la mesa se quedaron en silencio, la señora frente a ellos tenía razón, el padre de la joven ocultó su molestia y sonrió -¿ese examen? No tiene importancia, realmente mi hija lo quiso hacer por cumplir con su deber como ciudadana de este país, realmente la razón por la que los invité fue por la despedida de mi hija, ella ha estado estudiando duro para la admisión a su universidad en Europa y se irá en unos días, estará tan sumergida en el estudio que esta fue la única ocasión que tuve para hacer esta reunión- Las personas alrededor empezaron a aplaudir por lo que acababan de escuchar, menos tres personas, la mamá de la chica, el hermano y ella misma La cena fue rápida, las personas se marcharon media hora después Luego de que todo el mundo se marchó, el padre llamó al sirviente de hace un rato -llama a los tutores de Samuel, compra un vuelo para Inglaterra de ida para la próxima semana, llama a la universidad y concuerda una cita con el director- -papá, escúchame, puedo intentarlo el próximo año, ¿te parece? Pero no me hagas esto, no me alejes de aquí por favor- el papá ignoró lo que la joven le estaba diciendo- ¿puedes escucharme? Te lo ruego, papá…- -¿crees que voy a esperar a que me humilles el próximo año? Tu única responsabilidad era prepararte para el examen y pasarlo, me has decepcionado tanto, de ahora en adelante, no volverás a la academia de baile, estaré vigilándote y no pienses en estudiar baile en Inglaterra, estarás bajo vigilancia, atrévete a desobedecerme y te encierro en un internado- -y si mi sueño es ser bailarina ¿lo aceptarías? Todo este tiempo he estado haciendo lo que me dices, por primera vez quiero poder tomar las decisiones en mi vida- - ¿Realmente crees que ser bailarina es una carrera? Suenas tan ridícula ¿Quién te metió esas ideas en la cabeza? - -Mi mamá también fue bailarina ¿por qué yo no puedo? - -así que eso, la culpa es tuya… si no hubieras insistido en que Missa estudiara en la academia de baile nada hubiera terminado así, ¿quieres que ella cumpla ese sueño estúpido que tuviste? - -¿tienes que meterla a ella en esto? Estás hablando conmigo, a ella déjala fuera, suficiente tiene con ser tu marioneta que hace todo lo que le dices, sin ti ella hubiera sido realmente feliz, incluso mi hermano es una sombra tuya, ninguno puede vivir su vida sin consultártelo, yo no papá, yo no seré un títere que puedes manejar a tu antojo, estoy cansada de esta mierda- El padre llamó a su sirviente de nuevo -cancela todo, estoy cansado- el padre se sentó en su sillón- ¿quieres hacer lo que te da la gana? Está bien, pero no cuentes conmigo, ni con tu madre y peor con tu hermano, ahora… desaparece de mi vista- La chica se tragó sus palabras y subió a su habitación -enciérrala- ordenó el padre al sirviente- compra dos vuelos para mañana a Inglaterra, me encargaré de todo allá… si mi hija si quiera respira el aire fuera de la habitación, estás despedido- el joven subió tras la chica e hizo lo que le pidieron, al poco rato se escucharon los gritos de la chica, pidiendo que la dejen salir Gritó hasta que se cansó, incluso escuchó a su hermano discutir con su padre, a su madre ni siquiera la escuchó decir algo, estaba costumbrada, ella nunca habló por ninguno de sus hijos. Encontró la manera de salir por su ventana, mientras bajaba por las escaleras de emergencia escuchó la conversación entre su hermano y su padre -papá ¿tienes que ir demasiado lejos? He hecho todo lo que me has pedido con la condición de que la dejes tranquila, si la dejas, aceptaré casarme con la heredera de la empresa de textiles- -¿estás dispuesto a ir tan lejos solo por un capricho de tu hermana? Ya entiendo porque es tan rebelde, siempre estás resolviendo todo para ella- -ella ni siquiera sabe que tenemos este trato, solo quiero que ella viva su vida libre, no me importa si tengo que entregar mi libertad a cambio- -está bien, mañana irás a una cita con esa chica, si te casas con ella, tendremos el mercado ganado, dejaré libre a tu hermana después de la boda, así que apresúrate- A Missa no le sorprendía lo que había escuchado, siempre tuvo la sospecha de que su hermano hacia sacrificios por ella, pero no sabía que llegaría hasta ese punto, recuerda la última discusión donde su hermano se negó a aceptar un matrimonio arreglado Terminó de bajar las escaleras y empezó a correr mientras las lágrimas rodaban por sus mejillas pasando por encima de sus preciosas pecas las cuales oculta en casa con maquillaje, el cual ahora se ha desaparecido luego de estar fregando con su manga Missa no dejaba de correr incluso ahora que no tenía los zapatos puestos, corrió demasiado hasta que llegó a su lugar seguro, un lago el cual siempre ha estado iluminado gracias a la luz de la luna pero ahora estaba todo oscuro, era como si la luna también se hubiera cansado de ella, había encontrado este lago hace algún tiempo atrás y desde entonces cuando quería escapar de casa siempre corría hasta aquí, ese lugar tenía algo que lo hacía especial y único, ese algo ahora no estaba, también se había ido cuando más lo necesitaba "Lo siento por no ser suficiente" Susurró y caminó poco a poco hasta adentrarse lo suficiente, no sabía realmente la profundidad de este ¿será esa la única manera de por primera vez hacer algo por su hermano? La única razón por la cual Samuel siempre cedía era por su hermana, si ella no estuviera ¿por fin será libre? ¿estará a tiempo de recuperar su vida? Su cuerpo ya estaba muy débil y lo único que vio por última vez fueron las estrellas pequeñas que estaban esparcidas en el cielo Tan pronto como el agua cubrió todo su cuerpo cerró los ojos y de repente escuchó aquello que había querido escuchar antes de entrar al agua. Aquella melodía de aquella guitarra que siempre la hacía sentir segura, cada que llegaba aquí y cerraba los ojos escuchaba ese sonido, pero nunca supo de donde provenían, cada que abría los ojos estos sonidos desaparecía, parecía que solo los escuchaba en sus sueños. Estando bajo el agua luchó por mantener sus ojos cerrados ya que si esa era la última vez que lo escuchaba quería hacerlo hasta perder el conocimiento, pero un impulso hizo que sus ojos se abrieran repentinamente, para su sorpresa el sonido nunca se detuvo, pensó en eso como una oportunidad así que salió rápidamente del agua, lo que más le sorprendió es que la luna estaba tan brillante que iluminaba como nunca antes lo hizo, incluso parecía que la guiaba a aquel sonido, centrándose en un solo lugar. Bajo un árbol se podía ver una silueta que no podía identificar bien, pero estaba segura de que aquella melodía la provocaba la guitarra que tenía, no tenía nada que perder a estas alturas así que caminó más hasta estar cerca Cuando notó su presencia se detuvo, Missa estaba lista para hablarle, pero fue interrumpida por el sonido de la guitarra Su cuerpo aún seguía frágil así que se sentó a su lado sin mirar a aquella persona directamente al rostro Se detuvo por una segunda vez, pero ahora se había quitado la chaqueta y la colocó sobre ella - ¿por qué demoraste tanto? - susurró Missa -Aún tenemos tiempo ¿Puedes soportarlo un poco más? – respondió la persona a su lado Ella no entendía aquella pregunta, pero asintió, se acurrucó un poco más cerca de la otra persona y colocó su cabeza sobre su hombro, estaba débil, sus ojos casi se cerraban, pero se aguantaba, quería seguir escuchando - ¿Cuál es tu nombre? - le preguntó para hacer alguna conversa que la mantenga despierta -No creo que debas saberlo, tal vez no nos veremos por segunda vez así que no es importante- luego de eso se dio cuenta de que se trataba de una chica, su voz era más clara ahora que hace algunos segundos, tenía una voz demasiado cálida y era agradable de escuchar -Vendré... Mañana... Vendré a verte, lo prometo- a estas alturas Missa estaba temblando de frío y perdió el conocimiento Volvió a abrir los ojos, pero está vez en lugar de ver el cielo sus ojos visualizaron un techo blanco, aquel olor ya lo conocía así que sabía perfectamente donde estaba El hospital No sabía cómo había llegado ahí, sus recuerdos aún estaban borrosos y le dolía la cabeza como para pensar Trató de moverse un poco pero no tenía aún fuerzas, Samuel tomó su mano y la detuvo -Tu cuerpo aún está débil, no te esfuerces mucho, llamaré al doctor para que venga a revisarte- Siempre que terminaba en el hospital era a su hermano a quien veía primero, no le extrañaba que estuviera en lugar de sus padres - ¿Cómo llegué aquí? – preguntó a su hermano luego de la revisión del medico -tampoco lo sé, esta mañana llamaron a casa y dijeron que al parecer estuviste mucho tiempo bajo el agua y saliste, pero te desmayaste, alguien te encontró y te trajo- - ¿Estuve bajo el agua por mucho tiempo? - ahora que él lo mencionaba ella recordó que solo estuvo un poco más de 5 minutos -Me pregunto cómo fue posible si no sabes nadar, ¿estas segura que estabas sola?- ella no respondió- Missa…- Samuel tomó un respiro profundo-lo de la laguna ¿fue un accidente verdad? – Ella no respondió - has sufrido mucho ¿por qué no me lo dijiste? – Samuel no solo se refería al incidente del algo, si no que descubrió las lesiones de su hermana en sus muñecas- Debió doler tanto... Debiste sufrir mucho y no estuve para ti- -Sam, escúchame, nunca nadie me cuidó mejor que tú, ni siquiera las personas que me dieron la vida, eres la mi única esperanza de vida, ellos ni siquiera están aquí y para serte sincera, no los necesito, no quiero que renuncies a más cosas por mí, haré lo que papá me dice, pero ¿puedes no casarte? - - ¿hiciste esto para librarme del matrimonio? Missa, escúchame, nada vale más que tú vida, ¿crees que seré feliz sin ti? Eres mi único motor y mi única felicidad, no vuelvas a hacer algo así jamás- Missa no pudo contener sus lágrimas y abrazó a su hermano -lo siento por hacer que te preocuparas tanto, no era mi intención- -Yo lo siento, enserio lo siento- Samuel también dejó caer muchas lagrimas -Si ellos te vieran estarían muy molestos- dijo refiriéndose a sus padres -Ellos están preocupados también, cancelaron todas sus reuniones de hoy, cuando el doctor le dijo acerca de tus heridas... Ellos lloraron, nunca los había visto así antes, de hecho, están fuera- -Si hubiera muerto ¿hubieran llorado de la misma manera? Se habrían olvidado de mí en tan solo una semana, si están aquí ¿por qué no entraron? - -¿lo hubieras permitido? Solo están dándote tu espacio, hablaran mejor en casa- -no quiero hablar de ellos ahora, me duele la cabeza- -descansa, estaré sentado a tu lado- Missa movió sus manos para tocar sus propias vendas, realmente no dolían las heridas superficiales, lo que dolía era su corazón, aquel dolor que nunca pudo calmar, aquel dolor no se podía comparar con el de un corte pero que mágicamente desaparecía cuando escuchaba la melodía de aquella guitarra Ahora lo recuerda, la chica de ayer, la guitarra, la chaqueta - ¿dónde está mi ropa? - preguntó a su hermano Su hermano se levantó y le llevó una pequeña mochila -estaba mojada así que la llevaron a lavar, pero dejaron esto- sacó lo que estaba buscando Ella tomó la chaqueta y recordó lo que le había dicho, la promesa que le hizo -Quiero quedarme aquí... – dijo rápidamente -Pero esto es un internado para personas...- su hermano vaciló para decir la última palabra -Lo sé- - ¿entonces por qué quieres quedarte? Si quieres podemos buscar terapia en otros lados- -no lo entiendes, yo necesito encontrarla- - ¿A quién? – Samuel estaba muy confundido -A la persona que me sacó del agua... Ella me dio esta chaqueta- -No estoy seguro de que debas estar aquí, podemos venir cuando quieras de visita, pero este lugar... - -Realmente es todo lo que pido, por favor ayúdame a quedarme por favor, prometo no volver a lastimarme si me ayudas a entrar aquí, inventa cualquier cosa- -No creo que sea difícil, veré que puedo hacer ¿okey? - -Eres el mejor- Missa se aferró a la chaqueta como si su vida dependiera de ello y así era, su vida dependía de aquella persona, si no fuera por ella no estaría ahora teniendo la oportunidad de ver a su hermano una vez más Aunque no había visto su rostro con claridad, pero recordaba su voz a la perfección, definitivamente la encontraría Su hermano regresó luego de un tiempo a la habitación -Estuvimos hablando con la doctora, dijo que estaría bien si solo vienes a las terapias, papá le dijo que no era tan grave como para internarte, pero insistí en que estaría bien que te quedaras así que vendrán a hacerte algunas preguntas y es mejor que no menciones lo de encontrar a alguien, solo di que te sentirás mejor estando aquí y que necesitas tiempo lejos de nosotros para sanar un poco- - ¿Dónde están ellos? - -Fueron a casa a empacar tu ropa, lo más probable es que si te permitan quedarte ya que la enfermera añadió que no querías verlos así que ellos se resignaron y la doctora comprendió que ellos te lastimaban de alguna manera indirecta- -Lo hacían incluso en mi cara ¿Dónde fue eso indirecto? - -Eso debes decirle a la doctora- -entendido- -Entonces saldré para que entre ella- El chico salió de la habitación y enseguida entró la doctora - ¿Cómo te sientes ahora? - -Por lo menos puedo moverme un poco más- -¿por qué quieres estar lejos de casa?- -Estar ahí es demasiado difícil para mí, quiero alejarme de todo eso, quiero alejarme de ellos, quiero estar bien, quiero dejar de sentir dolor y realmente estoy buscando ayuda pidiendo esto- - cuando dices ellos ¿Te refieres a tus padres? - -Sí, ellos- - ¿Qué hay de tu hermano? ¿También quieres alejarte de él? - -No, pero estando en casa solo le causaba problemas, tal vez también sea un respiro para él- -Debes saber que tus padres están dispuestos a tomar terapia también, he conversado con ellos y... - -Dudo que les alcance el tiempo, debería hacer cita con su secretaria y con suerte tendrán tiempo después de que muera, enserio le digo, no confíe en ellos, es una pérdida de tiempo- -Se comprometieron a venir a cada sesión, por ahora tendrán terapia por separado hasta que te sientas lista para verlos- -entonces ¿podré quedarme? - la doctora asintió -Iré a preparar tus documentos, tu hermano nos ayudó a llenar tu ficha así que no debes hacer nada más, cuando terminemos te llevaremos a tu habitación-