Christopher miró a su familia, y levantó las hojas, se colocó sus lentes para iniciar la lectura, y todos, llenos de nerviosismo se quedaron estáticos viéndolo.
—¡Dinos ya, padre! —Eloise alegó — Sácanos de esta incertidumbre
—Bueno, como ya saben todos ustedes, mi testamento ha sido modificado, hay una nueva condición.
Fernando chasqueó los dientes y miró desafiante a Christopher —Abuelo, no es necesario, todos sabemos que yo soy el albacea de tu fortuna y el nuevo CEO de la compañía, ¿Acaso nos llamaste para decirnos cuando me posiciono en el cargo? Porque no veo otra razón
Christopher sacudió su cabeza y entregó una copia a cada uno de los miembros de la familia, en esta, estaban trazados los nuevos parámetros para la entrega de su fortuna, aunque ya se había fijado una parte igual para todos, la mayoría de sus bienes solamente serían cedidos bajo una condición.
—¡Esto es absurdo! —Gritó Fernando enojado —¿Cómo que Xavier también hará parte de la herencia? Si es que este hombre no es de nuestra familia abuelo.
Xavier rodó los ojos ante lo que leía, Christopher lo puso como parte de su condición.
—Padre, yo no puedo hacer esto, no me comprometas con algo que no me interesa, por mí, puedes cederle mi parte a Fernando de inmediato, que él sea quien lleve el control de todo, a mí no me interesa.
—Xavier , el primero de los dos que se case y forme una familia, será mi albacea, a mi no me quedan más de tres años de vida, todos los saben, ya lo dijo el doctor, pero me parece justo que mi nieto y tú tengan la misma posibilidad. —Christopher argumentó
Fernando rompió en mil pedazos la hoja que le dio su abuelo y se la lanzó por el pecho.
—Ni lo sueñes abuelo, no voy a competir con nadie, además, yo voy a casarme con Julia , esa fue la condición, que me casara con esa mujer, el matrimonio es en dos semanas.
—Fernando , Fernando —Christopher se levantó —hace poco recibí la notificación por parte de los organizadores del evento, la madre de Julia falleció y ella cancelo el matrimonio, ¿Vas a decirme que no sabías?
Eloise y Mérida se miraron entre ellas, y la madre del joven se levantó furiosa.
—¿Qué pasó qué? Fernando ¿Qué pasó, que hiciste?
—Mamá, es que Julia me encontró en el departamento con otra mujer, y se fue como loca, eso fue ayer. —Dijo Fernando con plena tranquilidad —Pero estoy seguro de que si la busco volverá rendida a mis pies, solamente me daré un descanso de su fastidiosa presencia.
Mérida , su hermana sacudió la cabeza, y se fue directo hacia él.
—Eres un completo imbécil, dañaste el nombre de nuestra familia, ¿Y ahora? Se supone que la herencia del abuelo debe ser solo de nosotros tres, mira nada más, el tío Xavier , ¡Ahora también puede quedarse con ella!
Xavier se cruzó de brazos al ver como entre ellos discutían, eran un completo desastre.
—Yo me largo de aquí —Dijo Xavier desinteresado, mientras que Fernando lo tomó por el brazo y le dio un fuerte puño en la cara
—Imbécil, todo esto es culpa tuya, pero sabes algo Xavier , no vas a quedarte con la herencia del abuelo, porque yo seré quien consiga una esposa, me casare con Julia , cueste lo que cueste. ¡Maldito aparecido!
Xavier movió su quijada, sentía tan solo un espasmo de dolor negó con la cabeza y miró fijamente a su sobrino.
—A mi no me interesa tu herencia, tengo mucho dinero, así que por mí, puedes quedarte con todo. Tú ni tu familia me interesa, perdedor. —Xavier se limpió en donde su sobrino lo había golpeado y suspiró —No vales la pena Fernando
Christopher aclaró su garganta y los miró a todos.
—¡Silencio! Las condiciones del testamento han cambiado, quien se case primero tendrá el control, ha, eso sí , debe ser un matrimonio por amor, no concertado, ustedes saben que me doy cuenta de todo.
Xavier se giró y miró a Christopher directo a los ojos, mientras que una gota de sangre salía de la comisura de sus labios.
—Papá, de verdad no me interesa, no quiero tu fortuna, déjasela a tu familia, yo tengo lo mío.
Christopher lo agarró del brazo.
—La propuesta está abierta hijo, confío en ti.
Xavier de nuevo lo besó en la frente, y miró a todos los presentes con desdén, salió hacia la puerta, mientras que Fernando le gritaba improperios.
—Cuídate padre —Fue lo último que Xavier le dijo a Christopher
—Maldito mafioso, te juro que no te quedaras con el dinero de mi familia, te haré la vida imposible. Te declaro mi más grande enemigo. —Fernando le gritó
Xavier sonrió irónico, y se fue, las amenazas de su sobrino, un chico menor que él por tres años, no le causaban gran importancia, sus enemigos reales eran peores, sin embargo, curioso por lo sucedido y ansioso por saber sobre lo escuchado en la casa de su padre, se dispuso a averiguar sobre la tal Julia
La limusina de Xavier se aparcó frente a la mansión y él se subió.
—Gerónimo, llévame a mi oficina
—Claro señor
Mientras que se alejaban de allí, sacó su telefono y comenzó a buscar información sobre la prometida de Fernando y el interés de su padre porque él se casara con ella. Cuando vio su foto, sintió una conexión, él era el hombre más mujeriego, y nunca una mujer lo atrapó antes, pero al ver la imagen de la enigmática mujer, de inmediato se despertó un repentino interés por ella.
Esa tarde se celebraba las honras fúnebres de la madre de Julia , ella hizo un anuncio en las noticias locales esperando compañía, pero por parte de la familia de su prometido no fue nadie, todos estaban esperando la lectura del testamento.
Xavier , con curiosidad le pidió a su chofer que cambiaran el destino, y en treinta minutos estuvo frente al cementerio.
Caminó despacio hasta donde se estaba celebrando el entierro, supo quién era Julia rápidamente, pues su rubia cabellera caía hasta su cintura, su menudo cuerpo y su baja estatura hacía que la mujer fuera fácil de reconocer, se veía mucho más sensible que en las fotos.
Ella estaba cabizbaja, en soledad, solo unas cuantas personas la acompañaron en su desdicha, su mejor amiga Susan Donovan estaba a su lado dándole consuelo, pero cuando levantó la mirada y vio el imponente Xavier , le movió el brazo a su amiga.
—Mira, ¿Quién es ese hombre? Debe ser un ángel que se escapo del cementerio ¿O más bien un demonio? Está precioso…—Susan olvidó por completo el momento que atravesaba Julia .
Sin embargo, Julia levantó la cabeza y sin querer miró hacia donde señaló su amiga, y al igual que ella, pensó que se trataba de una ilusión.
El hombre más espectacular que sus ojos vieron en la vida se asomaba directo hacia su lugar, Xavier era alto, de cabello oscuro, ojos grises, mirada seductora, y un cuerpo demasiado corpulento, tenía tan solo treinta años, pero su imponente presencia hacía que luciera como un experto seductor. Estaba vestido con un fino traje oscuro satinado, y sus pasos parecían que se hubieran ralentizado en cámara lenta, para dar una mejor visión.
—Buenas tardes, Julia —Xavier saludó —Buenas tardes, señorita —Dirigió la mirada a Susan
—Buenas tardes —Respondió Julia —¿En qué puedo ayudarle? ¿Cómo sabe mi nombre? —Preguntó ella confundida
Mientras que Susan apenas chorreaba la baba.
—Me llamo Xavier Branson , y vengo a hacer negocios con usted —El hombre dijo con voz seductora y llamativa. Extendió la mano para tomar la de Julia , sin embargo, ella sintió un escalofrío recorrer su cuerpo, ¿Branson ? El mismo apellido de su prometido.
«¿Quién es este hombre?» Se preguntó para sus adentros.