Detrás de la Falda

Capítulo 13

Entre al apartamento, sintiendo el aroma de alguna masa de hornear, mire el reloj eran las 10 en punto. Había demorado en la azotea y muchos más porque Dion no se iba, realmente no había sucedido mucho después de su confesión, solo se me hizo incómodo.

Camine hasta cocina encontrando a Josh con un montón de ingredientes, listo para hornear algo.

—¿Qué crees que haces? —Le pregunto observando todo el reguero que habia

Josh bufo, rodando los ojos.

—Hago estas galletas para Cherry —Me dice poniendo la masa sobre una bandeja.

—¿Ese es tu grandioso plan?, ¿Cuánto te tomo pensarlo, tres minutos? —Le digo en forma de burla.

Josh suspiro y negó con la cabeza.

—Kendall, no sabes nada del amor, no sabes lo que es estar enamorado, pero tranquilo, esas cosas pasan. Veras, supongo que ya sabes que Cherry no es una chica normal —Dice Josh.

—Creo que todos los notamos, ella misma se prometió casarse contigo —Le digo negando con la cabeza.

—Lo sé, ¿No es genial? Cambiando de tema, Cherry no me perdonara con unas rosas y unas cajas de chocolate —Me dice.

—¿Ah, ¿no? —Pregunto sin mucho interés.

—No, para poder tenerla de vuelta tengo que hacer galletas en forma de unicornio —Me dice como si fuera la cosa mas obvia de todo el mundo.

—¿Solo eso? —Pregunto alzando una ceja.

—Solo eso— afirmo

—Solo eso —susurre— Te veo bien mal, pero como no es asunto mío. Me iré a dormir, no te desveles, princeso

(…)

Me senté en el sofá esperando a que Josh hiciera acto de presencia, sabía que había ido al apartamento de Cherry, pero se estaba demorado. Debíamos ir a clases, y no planeaba tomar el autobús, como todas las mañanas Josh debía llevarme y hoy no seria la excepción, realmente no me importa si llego tarde.

Luego de un rato Josh entro con la mirada perdida tiro una bolsita a la mesa y el mismo se lanzó al sofá al frente mío.

No lo dude, y tome la bolsita, saque la galleta en forma de unicornio y empecé a comerla, estaba buena. No debía preguntar por algo que era evidente.

Levante la vista en dirección a Josh, me pare y me senté en el suelo, su cuerpo entero ocupaba el sofá, por lo que me era imposible sentarme junto a él.

—¿Qué pasa? Cuéntame tus desgracias. Si te deprimes no harás mi desayuno —Le digo, en un vago intento de animarlo.

Josh demoro un rato en contestar, pero al final lo hizo.

—Cherry, ya no quiere. Las galletas no funcionaron —Dice sin despegar su cabeza de la almohada.

—¿Te dejo por siempre? — le pregunte tomando otra galleta y mordiéndola.

—Ella dice que hay alguien más —Dice Josh, dejándome más que confundido.

—¿Qué fue todo el drama de ayer? — le pregunte indignado

Josh se sentó recto en el sofá y me miro a los ojos.

—Ese otro eres tú, Kendall —Dice sin apartar la vista.

Casi me atraganto con el cuerno de la galleta, tiene que estar jediéndome, ¿Cuándo todo esto se volvió un cuadrado amoroso?

—Creo que fue por lo de ayer —Dice al notar mi confusión.

—Pero, pero ella dijo que tú y ya. Ya no sé qué pensar— dije totalmente confundido.

Contemos mis pretendientes

1.       Loco acosador, también conocido como Logan.

2.        Rarito amigo de la naturaleza, se le conoce como Dion.

3.        Rara que ahora dice estar interesada en mí por un beso, Cherry.

¿Esto podría ser peor?  ¿Podría al menos tener algo de sentido?

Note como a Josh le brillaron los ojos como si acabara de ver algún dulce, o comida, cosa que deseo en este momento.

—Pero, no me detendré ella volverá conmigo, Cherry ama ir a la playa, es una gran idea

Josh se paró del sofá con una sonrisa en el rostro y volvió a salir del apartamento. Yo por mi lado, preferí terminar de comerme las galletas, estaban muy buenas, aunque las prefiero de chocolate.

Cuando al fin terminé las galletas, que no habían acabado con mi hambre, Josh volví a entrar al apartamento, nuevamente con la mirada perdida y se sentó el sofá.

Esta vez me senté a su lado en el sofá y lo miré esperando a que hablara.

—La invite. Solo ella y yo, dijo que no, porque tú no vas —Dice decaído.

Levante mi mano y acaricie su cabello.

—Eres idiota, idiota. Pero como soy un gran amigo.

Me pare y salí del apartamento, camine hasta el ascensor y una vez dentro de el presione el botón del piso, ya en el piso del apartamento de los tres amiguitos, fui hasta la puerta y le di dos golpes.

La puerta fue abierta por Chad.

—Enserio, no te cansas amigo. Ah eres tú, Kendall —Dijo el al notar que se trataba de mi y no de Josh.

—Sí, sí. Tengo hambre, déjame entrar para hablar con Cherry

Chad se hizo a un lado, dejándome entrar. Al estar dentro fije mi vista en Dion, quien se encontraba en el sofá, observándome.

—Hola— Me saludo

Mire hacia el pasillo, avergonzado.

—Hola— murmure— ¿Cherry? —Pregunto a ninguno de los dos en específico.

—¿Quién me necesita? — pregunto Cherry entrando a la sala.

La mire fijamente, una sonrisa se instaló en su rostro, observándome.

—Eres tú, Kendall

Sentí un escalofrió al recordar la palabra de Josh, sintiéndome aún más avergonzado. Me aclare la garganta, preparándome para hablar.

—¿Vamos a la playa? —Le pregunto lo mas natural posible.

—Es una cita— Pregunto con un rostro que demostraba alegría

—No. Va Josh, Dion y Chad —Le claro rápidamente.

—¿También no invistas?— Pregunto Chad

—No es como si quisiera— Susurre

—¿Qué?— Pregunto Dion

—Si, también están invitados, el próximo fin de semana

—Pero, no tengo nada, tengo que visitar a mi abuela el sábado, y en toda la semana estoy ocupada ¿Podrías comprar mis cosas Kendall?

Me encogí de hombros, yo también tengo que comprar mis cosas, ¿Por qué no?

—Bien, también tengo que comprar unas cosas—Respondí, miré a Chad.

—No iré contigo, pero si a la playa— Dijo saliendo de la sala

Suspire y mire a Dion, incomodo. No quería ir solo y sabía que Josh no me acompañaría

—¿Es una cita?— Me pregunto

—No —Vuelo a decir