Pov Aidán — Aidán hijo perdóname— veo sin entender a mi padre, por qué me pide perdon— si como oyes te pido perdon, no debí dejarte ir solo ahí, no es bueno, no estabas bien yo debí ir contigo, solo no quería ahogarte— yo niego, era mejor que estuviera solo— no debo dejarte solo te falle como padre, te deje solo en el peor momento de tu vida, donde estabas dolido, donde estabas vulnerable. No debí en serio que no debí dejarte solo, di por hecho que estarías bien que eres fuerte, pero aunque seamos fuertes también podemos ser débiles. — Yo no soy débil padre— le digo de inmediato, eso no lo permitiría nunca. Mi papá suspira y me ve negando— no lo soy y no me permitiría ser débil nunca, eso solo fue un bache, un lapso, como quieras llamarlo, pero no pasa nada, tú no me has fallado, nunca