CAPÍTULO VEINTIUNO
En lugar de responder a los intentos ocasionales de Blaine de entablar una conversación, Riley estaba concentrada en otras palabras. No habló mucho en camino a casa. Estaba escuchando la línea que seguía resonando en su cabeza.
“Niega a tu padre y rehúsa tu nombre”.
“¡Por supuesto!”, pensó. El significado del mensaje de Hatcher debió haber sido obvio desde un principio.
Pero ella había estado distraída por la idea de que el mensaje tenía algo que ver con su propia relación conflictiva con su padre... Bueno, si es que significaba algo en absoluto.
Pero ahora sabía que trataba de ese nombre que venía en la siguiente línea shakespeariana.
Romeo, Romeo, Romeo...
Recordó algo más que Julieta había dicho en esa misma escena...
“¿Qué hay en un nombre?”.
Por lo que pare
