Capítulo 2EL DUQUE miró sorprendido a Lolita. −¿Habla en serio?− le preguntó. −Muy en serio. Y creo que usted, entre todas las personas, debía tratar de vengar a mi padre, sobre todo porque él le salvó la vida. −Matar a un hombre durante un combate es una cosa; en otras circunstancias, es un asesinato. −Lo sé. Pero desde que mamá me contó exactamente lo sucedido, decidí que la muerte de mi padre no quedaría sin vengar. El Duque se reclinó en su silla y cruzó las piernas. −Vamos a tratar de razonar− dijo−. Comprenda que una idea como ésa, en una jovencita como usted, no solamente es una tontería, sino que resulta muy peligrosa... Lolita lo miró con expresión de disgusto, pero no replicó. −Siento mucho haberla abandonado durante tanto tiempo− prosiguió él−, pero no dude que me encarg