NUNCA EN UNA LUNA AZUL

ESTO ES IMPOSIBLE

“ESTO ES IMPOSIBLE”

“Todo lobo solo encuentra su cobarde ferocidad en la manada” Carlos Dòmini

Una vez que la puerta se cerró, Selene buscó a Platón y lo dejó acurrucarse junto a la chimenea.

-¡Que extraña mutación eres tú!

Selene se lamentó al verlo echarse a dormir.

-AH! ¡Luna brillante buen tiempo por delante! No hay mucho por hacer aquí, sin wifi ni señal, ni más, ya hemos comido y las armas por si acaso están cargadas todo un safari en una cabaña solitaria

Selene se resignó subió la escalera con una manta extra y comprobó que la fiebre de Simon no cedía. Este sintió la mano de Selene en su frente y se sobresaltó.

-¿Qué haces aquí Selene?

Simon se lo musitó sin abrir lo ojos y ella apagó las luces y corrió las cortinas.

-Selene es casi de noche, vete ya y descansa…

-Debo cuidarte, ¡Nick lo dice y es muy convincente!-ella buscó a un lado de las almohadas un paño aún frío y lo pasó por la frente de Simon que sudaba.

-Aunque corras las cortinas sucederá Selene. Lo sabes ya, me transformaré, vete, ya haz visto todo lo que debías.

- ¡Sh! ¡No soy alérgica al pelo hasta los gatos enfermos se comportan mejor que tú!

Selene lo tomó de la mano, luego delineó con sus dedos el poderoso pecho se Simón con a las de más, marcó cada músculo que cedió hasta la pelvis, pero no sé podría llegar a más ella no detendría la fuerza se la naturaleza, lo admitió , miró hacia la ventana, anochecía ya y un trazo de luna se coló por fin. Selene pudo sentir al lobo llegar corriendo en la oscuridad, arrastrase por ese cuerpo, tomar su corazón, su piel. La sangre de Simón hervía aun así ella permanecía a un lado en silencio, se echó en un mullido sillón junto a la cama y esperó.

-La luna se desliza voluptuosa por mi cuerpo…

Simon lo dijo sin que fuera él ya. Selene aguardó, estaba tan cansada y resignada que cerró los ojos a la inminente realidad.

--*--

La luna luchaba contra la oscuridad las aletas de su hocico solo percibian humedad. Ellos lo esperaban ni lo seguían pero oía su miedo ahora. No una maldición sino un don…pensó en ello con sus fauces abiertas mostrando al cielo sus colmillos, se movía al igual que unasombra, buscaba un jugoso bocado….la rendición de todos ellos. Y ellos sabían que él era superior lo sabían, aun antes de no ser él nada…. No hombre, no ser humano solo su presa…. Ver la luna en un pozo… así se decía al ser crédulo.

Tal vez no hoy no esa noche perfecta y plateada, muy pronto, alguien iría a su guarida sería digno de ser su par y solo entonces sería el comienzo del fin para otros, el otro rebaño de lobos allí esperando cazar a una presa mas peligrosa que ellos. La unión del rebaño obliga al lobo a acostarse con hambre… ¡pero al mejor pastor el lobo le roba una oveja!

--*--

Selene permanecía recostada en la cama misma, respiraba profundamente y está a arropada, se estaba despertando gradualmente cuando sintío un hocico húmedo en su mejilla y la inequívoca presencia de un lobo a su lado. Ella se despertó con una extraña sensación de confianza.

-Haz desecho mis vendajes Simon y tiene… tanto pelo… hueles a perro!

El lobo se inclinó lastimeramente. Clavó en ella sus ojos cautivantes como si entendiera sus palabras.

-Duele lo se, es difícil abrazarte asi Simon…me arrepiento de haber tenido un hámster de niña, de adolescente fue diferente, ah!tonta es la oveja que con el lobo se confieza! ¡Mira tus ojos son realmente tus ojos!me comprendes verdad Simon?

El lobo lamió la mandibula de Selene lentamente.

-¡No hagas eso! Duerme veo que estás adolorido como para ir corriendo en la nieve, tus cachorros están a salvo allí fuera libres en el bosque, solo te resta una noche Simon. Las estrellas brillan en derredor de la luna.

Por más que diera la esencia de Simon quien está a hubo a ella Selene debía de admitir que el cerebro era el de un lobo ahora.

Selene cerró los ojos nuevamente y cedió al calor de ese cuerpo peludo que se entregó al sueño también emitiendo un gozoso gruñido tal vez reprimió un aullido lujurioso. El comienzo de una fábula.

--*--

Dijo Esopo: cuándo el lobo se empeña en tener razón pobres corderos!

Las huellas fueron borradas con precisión Nick opinó eso apenas se hincó en la nieve. Sintío un enorme deseo de maldecir, si con todas sus fuerzas, hasta arañó la nieve.

-Maldita sea desgraciado animal ..¿Qué eres realmente? Está gozando en ponernos en jaque este lobo debe de habernos conocido sabe de nosotros y lo que es peor, lo tardará en reconocer nuestras debilidades.

Rick a su lado lo palmeó en el hombro tuvo el deseo de consolarlo pero solo busco las llaves de la camioneta y lo volvió a palmear en el hombro para que Nick se incorpora.

-Ovidio se acercó a la psicología lobuna al relatar la melancolía del rey-dijo por fin Rick recordando algunas palabras de Simon-El rey Licaon.pero…nada se acerca a eso Nick!

-Como Saskia dice….“A veces los lobos se alimentan de carroña…”

Fue entonces que dio un suspiro y recordó otra frase de ella: mientras el perro duerme el lobo come y ellos mismos se estaban trasnformando en perros falderos!

-Cómo sea está no es la forma de hallarlo, Borja y Tina ya armaron el campamento. Dejemos a Selene y a Simon a solas por esta noche.

Rick lo convenció de regresar con los otros . Nick sin mencionar palabra se subió a la camioneta. A solas. Comosbibeao solucionará algo a solas la mujer y el lobo nada bueno salía de ello y él lo sabía perfectamente. Daría buena parte de su intelecto para no volver a ser una lobo aunque eso significaba alejarse de una mujer y él tal vez no soportará aquello.

--*--

Amor y luna se parecen, menguan cuando no crecen

-¡Buenos días!

Selene se halló sola en la cama con Simon de pie vestido, sonriente, duchado y rasurado.

-Cicatrizas rápido! y pierdes poco pelo!-se burló ella.

-¡Y tú roncas! Si, si igual que murciélago colgado de cabeza- le replicó Simon con sorna.

-¡Solo silban! ¡Tonto!

Selene se incorporó intentando delinear la forma marcada a su lado.

-¡Te acusarán de zoofilia de persistir en esto Selene!-Simon se mordió los labios con comicidad.

-¿Sabes? No haz intentado ni una sola maniobra para marcar, digamos tu territorio, y las conozco todas Simon, cada galanteo de cortejo animal.

-Es que te vez muy lampiña para mi gusto.

Ya evitemos esta charla. Platón duerme en la camioneta ya y tú y yo iremos por el resto de la manada y créeme incluyo a Rick en ella.

Una simple orden, su manada más que su jauría, eso eran parias, deprotegidos, inconformes. Ella se duchó , desayunaron con apetito, empacaron lo necesario y planearon algunas compras y un recorrido por los alrededores. Respondieron un par de mensajes ella principalmente de Zoe que continuaba preocupada por su ausencia. Enviaba adjunto un simpático video del cachorro. Simon le respondió a su hermana omitiendo los obvios detalles al parecer la bestia definitivamente se había alejado del Central Park y el caso estaba siendo olvidado y cubierto por otras nuevas noticias. Solo Zoe estaba obsesionada por llegar a la verdad. Simon continuaba eufórico, canturreando, silvando, conduciendo a toda velocidad. Selene ya estaba bien despabilada y fotografió el perfecto paisaje gélido, sin atreverse a reguntar si él viviría asi siempre. Podría tener una cura? ¿Acaso a ella le importaba eso? Ya veía que estaba muy lejos de esos planteos.

Aunque quien anda con lobos aprende a aullar, lo supo cuando la luna brilló en lo alto temprana y los ubicaron. Rick preparaba la fogata, Platón se despertó y bajó de la camioneta de inmediato y fue tras él dando muestras de afecto. Los demás estaban ya en un conjunto heterogéneo de carpas y sacos de dormir, reian, aplaudieron al ver a Simon de pie.

-Nevará de seguro, toma tu abrigo y ponte a cubierto.