El último alfa

Capítulo 7

POV de Alina

Acababa de cerrar la puerta del baño y me apoyé en el lavamanos para tranquilizar mi cuerpo tembloroso, preguntándome por qué Logan tenía un efecto físico en mí, cuando la puerta se abrió de golpe y ahí estaba él. Con fuerza, la cerró y la aseguró con llave.

“Er... um... L-lo siento. Debo haber olvidado cerrar con llave la puerta,” balbuceé como una idiota. Sus ojos azul marino recorrieron mi cuerpo y luego volvieron a mi rostro, como si me estuviera mirando por primera vez. Vi cómo su mandíbula musculosa se tensaba, pero no hizo ningún intento de moverse o hablar. Vi pasar algunas emociones por su rostro. ¿Ira y... deseo? Sacudí lentamente mi cabeza. Necesitaba alejarme de él. Estaba empezando a perder la cabeza.

“Está bien... Bueno, te dejaré en paz entonces,” me moví a su alrededor para alcanzar la manija de la puerta.

De repente, sentí manos fuertes agarrar mi cintura y girarme para que mi espalda golpeara la puerta. Miré hacia arriba en shock y su rostro estaba a centímetros del mío. Esto me dio la oportunidad de admirar sus rasgos de cerca. Realmente era sorprendentemente guapo. Podía sentir su respiración rápida acariciando mi piel. Una de sus manos estaba al lado de mi cabeza contra la puerta y la otra todavía agarraba mi cadera fuertemente. Presionó su cuerpo contra el mío, aprisionándome. Inmediatamente, empecé a arder con su contacto y esta extraña sensación recorrió mi piel por nuestro contacto.

“¿Quién eres?”, su voz era grave y ronca y hacía que mi núcleo doliera de deseo.

“A-Alina Clarke,” susurré tan suavemente que estoy seguro de que no pudo escucharme.

De repente, movió su cabeza hacia la parte posterior de mi cuello y aspiró. Mientras lo hacía, recorrió tiernamente la punta de su nariz por mi cuello, enviando ondas eléctricas a través de mi piel. Un gruñido superficial escapó de su pecho mientras me retorcía ligeramente. ¿Acaba de gruñir? Y luego me susurró algo que no esperaba.

“Puedo oler tu excitación, Alina. Detente antes de que pierda el control.”

¿Qué? ¿Puede oler que estoy excitada en este momento? ¿Cómo? Oh, esto es más vergonzoso de lo que puedo soportar. Puse mis manos en su musculoso pecho e intenté apartarlo, pero no se movió.

“P-por favor,” supliqué mientras luchaba contra su poder. Levantó su rostro y tomé aliento bruscamente cuando vi que sus ojos azules zafiro habían cambiado a un color azul marino oscuro, casi n***o. Venas moradas sobresalían alrededor de sus ojos como ríos retorcidos en la selva. Parecía salvaje y peligroso. Supe en ese momento que lo lógico sería gritar con todas mis fuerzas y salir de allí lo más rápido posible, pero me sentía extrañamente tranquila. Algo me decía que no tuviera miedo.

Con vacilación, levanté la mano y acaricié las venas pulsantes con mis dedos, haciendo que se quedara inmóvil bajo mi toque.

“Tus ojos... están... ¿Qué eres?”

Sin previo aviso, arrebató mi mano y gruñó:

“Alguien de quien deberías alejarte, Alina. Necesitas salir de esta fiesta. AHORA.”

Y así, me apartó y salió corriendo por la puerta, dejándome preguntándome si algo de eso realmente sucedió, o si me lo imaginé todo.

Tomé unos minutos para terminar en el baño e intenté entender lo que acababa de suceder. Siendo estudiante de psicología, debería ser bastante buena leyendo las emociones y comportamientos de las personas. Sus acciones sugerían que sentía algo por mí, pero sus palabras decían lo contrario. Quería que me fuera. Pero, ¿por qué? ¿Qué le había hecho?

Cuanto más pensaba en nuestro encuentro, más me enojaba. ¡Cómo se atrevía a entrar aquí y tocarme y luego decirme que me fuera! Madeline me invitó aquí, la novia que parecía haber olvidado hace unos minutos, y no me iría a menos que ella quisiera.

Abrí la puerta y salí al pasillo. La puerta principal estaba justo en frente de donde estaba parada. Podía simplemente irme sin que nadie se diera cuenta. Pero luego miré a mi izquierda y lo vi observándome desde la cocina. El hombre que había dejado entrar a Chloe y a mí a la fiesta estaba hablando intensamente con Logan, pero sus ojos seguían fijos en mí. Levanté la barbilla aún más, sin romper nuestro contacto visual, y le regalé mi mejor sonrisa de desprecio antes de dar la vuelta y regresar a la sala de estar. No iba a permitir que este chico o cualquier chico a partir de ahora tuvieran control sobre mi vida.

Me acerqué a Chloe, quien estaba coqueteando descaradamente con un hombre de cabello rubio.

“¡Lina, ahí estás! Estaba a punto de enviar un equipo de búsqueda”, dudaba mucho de eso si consideraba cómo ella se había abrazado a ese desconocido hace unos segundos. “Aquí, toma otro trago. Parece que lo necesitas. Además, te hice un Malibú y coca,” se rió mientras el hombre le mordisqueaba la oreja.

“Gracias”, respondí, tomando el trago y aceptando la bebida de ella.

“¡Buttercup! Has vuelto. Vamos, siéntate conmigo”, llamó Darius desde el sofá.

De repente, sentí un calor bajo la mirada penetrante de alguien y supe exactamente quién era sin siquiera mirar atrás. En su lugar, caminé hacia Darius y me dejé caer en la silla junto a él.

“¿Alguien te ha dicho alguna vez que podrías ser una modelo de Victoria's Secret desfilando en esa lencería?”, coqueteó.

Me reí y le golpeé el brazo juguetonamente.

“No es lencería. Es un vestido y uno que ni siquiera quería comprar en primer lugar, pero tu amiga, Madeline allí, me obligó a hacerlo.”

“¡Qué bueno que lo hizo! Te ves increíble en él.”

No pude evitar mirar en dirección a donde sentía que salían cuchillos. Logan estaba apoyado en el marco de la puerta con los brazos musculosos cruzados sobre su amplio pecho. Se veía furioso.

Perfecto.

Pasé la siguiente hora riendo y bebiendo con Darius, Chloe y otros más, y debo admitir que realmente estaba empezando a pasármelo bien.

“¡Todos, vengan! ¡Siéntense en círculo en el suelo y juguemos verdad o reto!”, ordenó Madeline con una sonrisa traviesa.

“Gran idea. Me encanta ese juego,” dijo Chloe, siguiendo a Madeline al centro de la habitación. Estaba bastante segura de que Chloe aceptaría cualquier cosa que Madeline le pidiera en este momento.

“¿Jugarás, buttercup? ¿O no es realmente tu 'escena'?”, preguntó Darius con una chispa en los ojos.

Sabía que me estaba provocando y estaba funcionando. Pero hoy soy una nueva Alina y estoy dispuesta a lo que sea. Me levanté con una sonrisa y caminé hacia el grupo que había formado un círculo en la alfombra y sentí que él me seguía.

“Espero que estés listo para jugar, buttercup. Maddy puede ser implacable,” me guiñó un ojo y se sentó en el suelo a mi lado en posición de loto.

Vale, respira hondo, esto será divertido, me dije a mí misma.