1

762 Words
-¡SIGUIENTE!- exclamó Ryan ya cansado de que luego de tantas entrevistas nadie pueda cumplir con lo requerido No podían quedarse con ese puesto libre y tenían que ser cuidadosos, la razón por la que ese puesto estaba vacío fue porque la anterior persona junto a su secretario de confianza habían vendido información confidencial a otra empresa rival El desfile de modas estaba cerca, la empresa no podía perder su reputación, necesitaban un diseñador urgente, luego se encargaría de buscar un secretario -Jefe, solo queda uno más- -¿Y qué esperas para decirle que pase?- miró a la chica que estaba sentada frente a él, fue a la entrevista pero según Ryan a ella le faltaba todo para entrar a ese puesto- puedes retirarte- -Si me da un momento puedo enseñarle todas las cualidades que tengo ocultas- dijo la chica intentando seducirlo -Te doy un segundo para salir ahora de mi oficina- dijo enojado aún más- dile al próximo que pase- -Él aún no llega, pero su carpeta de trabajo es muy buena, tal vez puede verla mientras llega- -Cuando llegue le dices que no voy entrevistar a alguien irresponsable, creo que fue muy mala idea decirle a mi hermana que escoja a las personas que entrevistaré, tráeme todas las carpetas que tengas por favor, yo me encargaré de hacer la elección esta vez- -como ordene- al abrir la puerta se encontró frente a ella a un joven quien al parecer estaba tratando de normalizar su respiración antes de tocar la puerta- Buenas tardes ¿Te puedo ayudar en algo?- -vengo...a la entrevista- respondió - las entrevistas terminaron- dijo Ryan alzando la voz -Yo... Realmente lo siento enserio, vivo muy lejos y...- -excusas- Ryan se levantó de su puesto -No lo son, tuve que levantarme demasiado temprano para estar aquí, además de tener que caminar mucho porque no habían buses a esa hora- -dije que se acabaron las entrevistas, tus excusas solo empeoran las cosas, para trabajar aquí debes estar disponible las 24 horas ¿qué harás si hay una emergencia y debes venir urgente?- -si consigo el puesto me mudaré cerca- -No tengo tiempo ahora, retírate- -No me voy a ir hasta que me entreviste o al menos debería dejarme mostrarle mis trabajos- -Las entrevistas de secretarios son mañana- -Vengo por el puesto de diseñador- -¿Tú? ¿Diseñador? Que buen chiste ¿Cuántos años tienes? ¿5?- comentó la chica que hasta ahora no se había marchado -Te pedí que salieras hace un buen tiempo y sigues aquí, si no te vas, llamaré a seguridad y nunca podrás poner un pie aquí- -nunca me dio una respuesta- -¿qué te haya corrido de mi oficina no es ya una respuesta?- -se va a arrepentir de esto, nadie me trata así- la chica tomó su carpeta y salió indignada -¿entonces? Si me dejará dar la entrevista- volvió a preguntar el chico -no, fuera de aquí- -No importa cuántas veces me rechace, haré lo posible por obtener el trabajo- dijo muy seguro de si mismo -suerte con eso, soy yo quien decide si entras o no y desde ya te voy diciendo que pierdes el tiempo- -esto es un pésimo servicio de su parte, no sé cómo lo soportan las personas que trabajan con usted- levantó la carpeta que llevaba consigo- ¿puede al menos revisarla?- -No necesito hacerlo porque no trabajarás aquí- -Gracias por su tiempo- le dijo y se dio la vuelta para marcharse Mientras caminaba fuera del lugar se encontró con una pileta muy linda la cual estaba en la parte trasera de la empresa y se quedó parado frente a ella recibiendo la brisa Se sentía tan mal que no quería regresar a casa ¿qué le diría a su madre? Es la única oportunidad que tenía y la perdió ¿Cómo podría ayudar a su familia en casa? No queria decepcionarlos, antes había decidido no volver a verlo más pero se tragaría su orgullo solo por su familia y para demostrarle que lo podía lograr. Se sentó en el filo de la fuente y sacó un lápiz y busco una de sus hojas limpias, tal vez pueda lograr diseñar algo que pueda convencer al dueño de la empresa. Pasaron 3 horas, Ryan regresaba a su oficina luego de una junta que solo lo hizo preocupar más, los rumores habían empezado a correr y todo mundo comentaba que la empresa más importante de la ciudad y del país no estaría presente en el desfile. Decidió salir de la empresa y caminar un poco para pensar, para su sorpresa aquel chico también estaba ahí, en su lugar. Siempre que se sentía desmotivado o frustrado iba a aquella pileta pero esta vez no se acercó solo lo observó por unos minutos hasta que el chico decidió marcharse, Ryan se acercó a la pileta ahora que no había nadie más
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD