Isak No he parado de pensar que mi cabeza casi explote está bien, no la voy a presionar creo que debo valorar el hecho de que pueda estar en la vida de mi hijo así sea a escondidas. Solo quiero hacer algo que me dará paz y sobre todo me ayudara alegrarle la vida. Estoy en mi estudio, miro las fotos de cuando mi madre era joven, muchas de mí en su vientre. Escucho la puerta y esta se abre. —Hijo.— le dejé un mesj que viniera que tenía algo en mi nuevo estudio. —Pasa mamá.—ella pasa, deja sus cosas y llega a mí abrazarme. ¿—Te gusta? Quería tener mi lugar aquí.— —Me gusta verte así de feliz hace mucho no veía ese brillo en los ojos.— Ella se sienta y me sirvo un trago a ella igual, aunque se que casi no toma. —Si pasa algo, pero quiero que antes que nada me escuches y sepas que seg