Mi Mejor Amiga Robó a Mi Novio Real

1

Mi mejor amiga en el mundo entero está besándose con mi novio en nuestro lugar favorito. ¡Nuestro lugar! Bajo la sombra de los árboles, escondidos en el bosque, junto al lago que brilla bajo la luz del sol. Ha sido nuestro lugar desde que lo hicimos oficial hace cinco años. Ella está tocando su cabello, el suave y bonito rubio con el que he pasado días jugando y admirando. Inhalo una gran cantidad de aire, y me sostengo el pecho mientras empiezo a jadear por más. Cuando recibí un mensaje de texto de una persona anónima que me informaba que mi mejor amiga y mi novio estaban rondando a mis espaldas, lo primero que pasó por mi mente fue que esa persona estaba loca. Confíe en ellos con todo lo que soy. Ignoré el primer mensaje de texto, descartándolo como nada más que una persona celosa tratando de destruir lo que teníamos, y ahora me siento como una completa tonta por haber confiado ciegamente en ellos. Hoy, después de recibir otro mensaje anónimo sobre ambos enganchándose dentro de su limusina con una foto de ellos entrando en el auto, pensé que tenía que haber una excelente razón para que eso estuviera sucediendo. Pero cuando llamé a Bryan, y él eligió mentir sobre su paradero y con quién estaba, supe que algo estaba increíblemente mal. Aun así, quería confiar en ellos. Entonces, llamé a Aria y le pregunté dónde estaba; ella también mintió y dijo que tenía una cita con el peluquero real. Fue entonces cuando supe que tenía que dejar de ser tan confiada y llegar al fondo de esto. Los seguí durante mucho tiempo; no había ninguna prueba de nada sospechoso que estuviera sucediendo hasta ahora.

¿Cómo no vi las señales antes de esto? Aria siempre ha mirado a Bryan de una manera que demostraba que tenía sentimientos hacia él. Siempre desestimé las advertencias pensando que nunca harían nada para lastimarme; nunca vi venir esto.

Bryan solía halagarla; de hecho, la halagaba más de lo que jamás lo hizo conmigo. No podía culparlo; Aria era hermosa con su cabello rubio y sus brillantes ojos azules. También tenía el tipo de figura por la que los hombres tendrían accidentes para verla mejor.

Yo, en cambio, siempre me decían que era demasiado delgada y necesitaba comer más. Tanto Bryan como Aria a menudo me decían esas mismas palabras. Nunca pensé mucho al respecto, aunque sus palabras me hicieron sentir increíblemente insegura.

Yo tenía el cabello rojo brillante y ojos verdes con pecas en mis mejillas, y no tenía el trasero que tenía Aria, ni tenía pechos grandes. Nunca tuve celos de ella; sin embargo, siempre estuve orgullosa de tener una amiga tan hermosa. Los chicos a menudo me usaban para acercarse a ella; no puedo contar las veces que los hombres se me acercaron, con la intención de conocerla a través de mí. Aun así, siempre lo desestimé, feliz de tener una amiga tan famosa como ella.

Bryan ha sido mi novio durante más de cinco años; tenía apenas catorce años cuando comenzamos a interesarnos mutuamente después de ser mejores amigos durante años antes de eso. Para mí, él era todo; planeé todo mi futuro con él en mente. Incluso discutimos cuántos hijos tendríamos después de que nuestras familias reales nos casaran. Se suponía que iba a ser una de las bodas más grandes que nuestros reinos hayan presenciado.

Pero ahora, claramente, mi mundo entero se estaba desmoronando ante mis ojos. Todo en lo que había soñado, todo lo que quería hacer en el futuro, se acabó en un segundo rápido. No solo perdí a mi novio, al hombre con el que quería pasar el resto de mi vida; también perdí a mi mejor amiga. Siempre pensé que quedaríamos embarazadas al mismo tiempo y seríamos amigas cercanas incluso después de casarnos con el hombre al que amamos. Incluso hablamos de que nuestros hijos fueran amigos como nosotros. Cómo me traicionarían de esta manera está más allá de mi comprensión.

Siempre pensé que Aria se casaría con Ashton; parecían la pareja perfecta. Ashton se igualaba en apariencia; era tan guapo como ella era preciosa. También había este lado oscuro en él que hacía que las chicas se desmayaran por él. Nunca lo miré de esa manera; de hecho, casi nunca nos llevábamos bien. Apenas nos decíamos palabras el uno al otro. Una imagen de su hermano demoníaco irrumpe en mis pensamientos, y de nuevo siento la necesidad de respirar.

Adam... Ese era su nombre. Adam Ashford.

Su familia era diferente a cualquier otra en nuestro mundo sobrenatural. Su poder era diferente; era peligroso, oscuro, aterrador. Podía crear agujeros negros, pero no cualquier agujero n***o, sino el tipo que liberaba demonios. Aunque su familia, en general, era aterradora, Adam estaba en un nivel completamente diferente. Podía crear más de uno al mismo tiempo, lo que lo hacía más peligroso que el resto de ellos.

Sacudo la cabeza; no era el momento de pensar en él. Ya he pasado innumerables noches sintiéndome culpable por mis pensamientos prohibidos sobre el príncipe turbio; así es como le llamo. Nadie más lo hace, solo yo. Quiero decir, sí, todas las demás chicas alrededor de nuestra escuela tienen sus nombres para él; por ejemplo, el príncipe oscuro, el hombre prohibido, podría seguir y seguir. Aun así, el mío es mi favorito. Es mi secreto, mi loco secreto, que de alguna manera hace que mis entrañas se derritan. Me encanta la idea de tener un nombre secreto para él; algo en ello me hace sentir que estoy más cerca de él, a mi manera rara.

Muevo la cabeza. No otra vez; lo saco de mi mente con fuerza.

Tenía cosas más importantes en las que concentrarme, incluyendo a mi novio infiel y a mi mejor amiga mentirosa, quienes, en este momento, todavía siguen en eso. Se están quitando la ropa mutuamente.

¿Cuánto tiempo ha estado pasando esto? ¿Cuánto tiempo han estado traicionando la amistad que tenemos? Estoy enojada, no estoy pensando bien; sé que quiero lastimarlos tanto como me están lastimando en este momento.

Saco mi teléfono de mi bolsillo y apunto la cámara a los dos, metiéndose la lengua en la boca el uno al otro. No pierdo tiempo intentando enfrentarlos; me doy la vuelta y me voy. Después de hoy, no tendré nada que ver con ninguno de los dos.

Sin pensarlo dos veces, subo el video a mi cuenta de FirePic. Tenía más de un millón de seguidores allí, y mi popularidad solo se debía a Aria y Bryan. Ellos ya eran populares por sí solos; todos me seguían solo para estar al tanto de ellos.

Ahora todos sabrían que los dos son unos mentirosos y traidores.