-Que mierda haces aqui, Loren?- El tono rudo de Mikkael alerto a Taina de que no era una compañia muy grata aquella rubia... -No cambiaste la clave, querido O tal vez, si lo era? -Habla de una vez, Loren- gruño Mikkael sosteniendose el puente de la nariz y mirando de reojo a su Leanna, quien no se veia muy contenta con la ceja levantada y el ceño fruncido. Le debia una explicacion pero aquel no era el momento. Loren tomo el atrevimiento de caminar hasta el minibar, sacar dos copas y una botella de vino, como si estuviera en su casa, eso hizo hervir la sangre de Taina, quien estaba inmovil en el umbral de la puerta y que, por un delicado jaloneo de Mikkael quien la miraba suplicante para que no se fuera, suspiro y avanzo dos pasos, distanciandose de el y cruzando los brazos sobre el pec