- Está bien, aunque John no está aquí todavía tenemos que seguir entrenando.
- ¿Pero cómo? Somos un número desigual- Murmuró Franklin.
- Bueno...- Genesis comenzó, tratando de pensar en una respuesta mientras tanto-. ¡Ah, ya sé! yo contra ustedes dos.
- Estás bromeando, ¿verdad?
- No, les daré chicos tres minutos antes de atacar- Y con eso desapareció de la vista.
Y seguramente después de tres minutos Genesis los atacó. Seguramente había ganado velocidad y agilidad con todo ese entrenamiento con Flor. Ella sonrió secretamente cuando Franklin apenas esquivó una patada en su estómago. Se inclinó hacia abajo y apoyó la mano en el suelo mientras esquivaba el ataque que Gabriel apuntaba hacia ella. Dando vueltas un par de veces, lanzó cuchillos en su dirección y saltó sobre el agua; Sus m
