Anna
Todo empezó cuando mi mejor amigo, Brandon y yo cortamos. No fue nada personal, de hecho nos seguíamos llevando muy bien.
Pero los dos nos dimos cuenta de que no funcionábamos como pareja formal. A mí me gustaba demasiado salir a bailar con desconocidos hasta el punto de querer tirarmelos.
Pero nunca le fui infiel, le confesé que no podría llevar con él una relación cerrada. Él estaba muy triste, sin embargo también me confesó que había un chico que le estaba empezando a gustar.
Nos dimos un abrazo y ahí quedó todo. Pero jamás me perdoné no llegar a acostarme con él. Brandon tenía un pelo n***o espeso y rizado con piel canela, que me daban ganas de lamerla.
Por no mencionar su cuerpazo, deseaba a todas horas que me reventara contra la mesa. Pero sólo nos besamos, ¡menuda mier
