[Violeta] Me levanto con cuidado de no despertar a Kiwi, quien desde hace una semana estaba conmigo y tal como lo había imaginado, su cama es la mía y en especial ama dormir detrás de mis rodillas, porque al parecer se siente protegida. Voy al baño para arreglarme rápidamente e ir a llevar algunos domicilios importantes, antes de abrir la floristería. Estoy agradecida de que hayamos sido contactados para un evento importante en uno de los hoteles más importantes de la ciudad, así que debía empezar a cargar en la van todos los centros de mesa que tengo en el refrigerador. La pequeñita ya se acostumbró a estar en el apartamento y lo que yo hago, es subir varias veces en el día, para ver que todo esté bien y no le falte nada, además, que todos estuvimos de acuerdo con empezar a almorzar