—¡Alto! —brama el boricua y está trepado en una silla—. ¡En lo que se prepara el pelmeni, mi amigo Vilen, hará su primer glazunya! —Hace un escándalo con las manos cubriendo su boca de altoparlante. Los chicos empezando por los trillizos y terminando por Jacob hacen alboroto. Seba salta de la silla y el Gigante le da una palmada devastadora en la espalda. El boricua se encorva y le riñe su falta de tacto. —¡Joder, eres tan rudo, Gigante! —discute Seba. El boricua echa andar y recoge el plato que usó Maika para explicar como romper con suavidad el huevo bebé. Este chico vivaracho es insoportable y metiche, pero entendió mi deseo de hacer un jodido huevo frito. —¡Voy a ti, Idiota! —grita Heriberto y se acerca—. ¡Henrik, muéstrale como se hacen unos huevos fritos! Henrik viene acompañad