En Rusia se hallaba Jessa sentada en la sala sollozando y Dominik haciéndole compañía y consolándola pero ella hablaba con dolor
—Se esta casando con…esa mujer, Alexander ama a esa maldita mujer que se asomo de repente
Dominik trataba de apaciguarla pero era un imposible, era una mujer enamorada con una daga clavada en su corazón
En medio de su dolor recordaba como se amaron con intensidad, esos recuerdos hermosos tapizados del dolor de saber que no la recuerda y ama a otra mujer, cuando se levanto del sofá con un rostro muy serio, observo a Dominik y vociferó muy dolida y decidida
—Me voy a esforzar en ser la mejor asesina voy a hacer pagar a todos los que me lastimaron —hizo una pequeña pausa— y si en mi venganza cae Alexander que así sea
Para Dominik el escucharla le causo temor
