LOS HOMBRES TAMBIÉN LLORAN

Capítulo 12 - LOS HOMBRES NO LLORAN

Un enorme escándalo, me buscan por cielo, mar y tierra, han formado un chisme, hay gran cantidad de teorías, los periodistas los asedian día y noche, han tenido que fortalecer la seguridad, imagino que mi padre está furioso, lo último que necesita es un escándalo en medio de su campaña.

Han pasado 6 meses desde la divulgación del vídeo y parece que por fin se empieza a hablar de otra cosa, estoy absolutamente tranquilo, vivo humildemente pero no paso necesidades, hago servicio social medio tiempo en las veredas apartadas del pueblo, esto si es trabajar por la gente, involucrarse en su mundo y sus problemas te vuelve más humano, muchas veces el mundo es solo las cuatro paredes de tu casa, tus comodidades y tus necesidades de niño rico, no aprecias lo que tienes porque crees que nunca lo vas a perder.

Todas las experiencias vividas los últimos meses, me hacen odiar aún más la politiquería mal sana de estos últimos tiempos, la corrupción que empobrece cada día más al que si trabaja, quiero hacer algo, pero no tengo ni los recurso ni el poder para hacerlo.

Andrew bromea diciéndome que debería ser presidente... Bueno, para ello se necesita preparación y realmente de política no sé nada.

Quiero ayudar, sí, pero no tras un escritorio, mi deseo es estar donde realmente se requiere gente con corazón.

Los últimos días, lo he pasado más con la gente del campo que en mi casa, mientras examinaba a unos niños, escuché una voz familiar...

—¿Quién eres y qué has hecho con el acartonado y bien portado Sebastián Andrade?

—¡Alexia, qué gusto verte!

—Lo veo y no lo creo, barba, pelo largo ¡y esa ropa! Pareces indigente.

—Hay que despistar al enemigo.

—Créeme, nadie te va a reconocer así jamás.

—Y dime, ¿Qué te trae por aquí?

—Ah, pues un pajarito me contó que necesitan voluntarios y quiero ayudar, un poco de labor social no le caería mal a mi historial en el libro de San Pedro, quien quita y después de todo si me dejen entrar al cielo.

—Bueno, aquí hay mucho que hacer, me gustaría que pudieran cultivar su propia comida.

—Bueno, pues dime que hay que comprar y enseguida lo conseguimos.

Le paso una lista con los elementos básicos que se necesitan, bien extensa, por cierto, no pone objeción alguna y se va; entrada la noche llegó en un camión grande en compañía de Andrew y dos personas más, con herramientas, insumos, semillas... Todo lo necesario para que pudieran empezar su propio cultivo.

Los moradores muy agradecidos, hicieron una comida para nosotros, inicialmente me niego a recibir, porque conozco muy bien su situación, pero no quería que sintieran que les estaba despreciando.

Alexia contrató a un par de personas que van a enseñarle a los habitantes a sembrar, cuidar, cultivar y cosechar sus propios alimentos. El dinero saldrá de su bolsillo, ciertamente, nosotros venimos de familias que tienen tanto dinero que no saben qué hacer con él, en su caso, por fortuna sus padres apoyan todos esos proyectos filantrópicos.

Me siento cómodo, tranquilo y feliz con mi vida actual, no pienso ya en el futuro y no me mortifica lo que esté pasando con mi familia, sin embargo, Andrew me ha aconsejado que haga una denuncia formal, pero sigo sin ver la necesidad de ello.

El proyecto de los cultivos ha avanzado bastante, ya se ven los primeros brotes y a pesar de las extenuantes jornadas de trabajo, la satisfacción del deber cumplido y lo mejor.

Regresamos tarde a casa y para mi sorpresa me encuentro en la puerta nada más y nada menos que a mi hermana Annette.

—¿Qué haces aquí?

—Lo mismo que tú, escapando.

—¿Cómo me encontraste?

—Jamás te perdí el rastro, hace años tengo a alguien que sigue todos tus movimientos y me informa cada paso que das, cosa que por fortuna a papá jamás se le ocurrió.

Su esposo está en la cárcel, pues en varias ocasiones sirvió a mi padre en sus negocios ilícitos, pero como es su firma la que aparece en todas partes, fue inculpado y mi padre por su parte, se ha desentendido del tema.

Annette, logró desocupar las cuentas, pues un amigo cercano le informó días antes de su detención, para que ella pudiera sacar el dinero antes que las congelaran los bancos; ahora, está aquí conmigo.

—Tengo todas las pruebas para denunciar a papá.

—No me interesa.

—A mi si, movió sus influencias y me quitó a mi hijo, necesito recuperarlo, así no me ayudes, lo voy a hacer.

Andrew escuchó la conversación y se ofreció a ayudarnos, sus padres son abogados y según él, estarán complacidos en tomar el caso, no por solidaridad, sino por fama, igual, ayuda es ayuda.

Dos meses recopilando el mayor número de pruebas, testimonios, testigos... Todo estaba listo.

Después de mucho tiempo, me corté el pelo y la barba, me puse traje y corbata.

Así se hizo, demandé a Sofía y a mi padre por maltrato físico y sicológico, mientras tanto, Annette lo demanda por enriquecimiento ilícito, evasión de impuestos, narcotráfico y varios cargos más.

Al ser un personaje tan conocido, en un par de horas, todos los medios lo sabían y una vez más, nos convertimos en el tema de moda.

Las r************* que no perdonan, se llenaron de memes, comentarios s favor y en contra...

"Lo que hace la masculinidad frágil, lloran porque les dicen feos"

"¿Qué sabrá el mocoso ese de sufrir? Fijo es una pataleta porque papi no le compró el Ferrari que quería"

"Muy huevón dejarse pegar de la mujer, yo le meto un trancazo y ahí la dejo"

"El hombre de la casa tiene que darse a respetar"

"Esos ricos y sus dramas pendejos... Fijo lo regañaron por tirar su pelotica de oro y ya viene a decir que lo maltrataron"

"¡Este man nos hace quedar como un culo! LOS HOMBRES NO LLORAN"

Eso, precisamente eso, es lo que quería evitar.