Cuando Spencer escuchó el característico sonido de las olas del mar, rápidamente fue hacia su ventana y corrió la cortina para contemplar a Jagger estacionar su motocicleta frente a la entrada del edificio.
Con sus miradas encontrándose, el omega agitó felizmente su mano en forma de saludo y luego se alejó.
Apresurándose en tomar su mochila, Spencer chilló cuando esta quedó atrapada y tiró de su cuerpo hacia atrás, provocando que cayera sobre su trasero.
Quejándose, observó con infantil resentimiento el mueble que tenía atrapada una de las correas de su mochila y resopló.
—Mi trasero dolerá ahora por tu culpa y no por las razones que me gustaría —refunfuñó levantándose del suelo con un poco más de cuidado.
Sacando su mochila con cuidado, se la colocó en su espalda y salió de su depart
