Soy una mujer casada con 38 años actualmente. Sin atentar contra la modestia, debo decir que los hombres me consideran muy atractiva, sexy, empezando por mi esposo quien disfruta mucho haciéndome vestir con minifaldas y ropa provocativa para que otros hombres me miren con deseo. Me casé a los 20 años, habiéndome mantenido virgen hasta los pocos meses luego de conocer a quien sería mi esposo, quien me cambió mi estatus de niña a mujer. Cuando me conoció llevaba tres años divorciado de su primera esposa. Luego de un noviazgo de 14 meses me propuso matrimonio, lo cual inmediatamente acepté a pesar de que tenía yo varios pretendientes solteros, (quiero decir sin pasado) pues por una parte vi que él sería un esposo cariñoso y enamorado de su nueva mujer y por otra parte, habiéndole ya entregado