El señor perverso, toma de nuevo el control remoto y una luz roja se enciende, los actores levantan la mirada, la cara del hombre cambia, es como si quisiera comerme con sus ojos, ¿En qué lío me he metido?. La mujer sonríe y vuelve a pasar su lengua por sus labios. "Lo quiero a él, es increíblemente guapo" — Entrecierro los ojos y mi vientre vuelve a llenarse de nudos, no quiero que desee al señor Perverso, él es mío, aunque solo lo sea por siete días, mi pensamiento posesivo me sorprende. La habitación se queda en silencio, solo puedo verlos, pero en realidad, en este momento solo me interesa lo que el señor Perverso me hace sentir. El saber que nos miran ha aumentado mi lascivia, mi cuerpo se mueve más seguro, mi mente se siente libre y me excita el comprender que otras personas dis