[FACUNDO]
(Por la madrugada)
La guerra de besos que comenzamos en aquella discoteca no encuentra su fin y ya no sé si son los tragos que hubo entre beso y beso, si fue su manera de moverse y provocarme, o si es que en el fondo moría por esto que está ocurriendo ahora, pero aquí estamos entrando a mi casa sin que nuestras bocas puedan separarse y siendo víctimas perfectas de las manos del otro que nos va desnudando. Su blusa desaparece de camino a la habitación dejando al descubierto sus pechos, esos que sabía que eran perfectos pero que esta noche confirmo, mi camiseta vuela en el aire cayendo en el pasillo y la manera que siento su cuerpo pegado al mío, provoca un desorden total en mi ser. Su lengua y la mía no se dan tregua en medio de caricias que queman todo y de repente mis piernas
