Sentirse observado no era extraño para Elliot, lo que sí era inusual, era no poder sentir la usual molestia, lujuria e incluso odio a través de esta. Eso, sí era raro. Como, extremadamente extraño. Con Isaac mostrando interés en él luego de un particular ataque que lo dejó realmente mal, la mayoría de los alfas y betas que habían estado divirtiéndose a su costa disminuyeron sus ataques, ya que no querían sufrir la furia de alguno de los tres hermanos King. Claro que con la protección de Isaac a pesar de ser “respetada” por la mayoría, seguía habiendo algunos idiotas como Dorian o su estúpido amigo Sergei que seguían buscando problemas con él, así que realmente no era inusual ser constantemente observado mientras trabajaba. Pero aquella mirada insistente en su nuca sin intención alguna