Lillie
Intento demostrar tranquilidad para que no se note cómo me pone tenerlo tan cerca cuando estamos solos. Desvío la mirada y la fijo en su camisa; la parte de su hombro está húmeda. Su herida sangra otra vez. Aún falta que le hagan curación.
—¿Tendrás algún botiquín con el equipo necesario para hacer una curación? —pregunto sin quitar mis ojos de su hombro.
Asiente. Con un suspiro profundo se aleja de mí para buscar el material necesario. Desaparece cuando entra por una puerta y tarda un minuto en volver. Trae consigo una caja más equipada que la anterior. Se sienta en un sillón y deja la caja en la mesa de centro. No tengo otra alternativa que acercarme y tomar asiento a su lado. Prosigo con mi trabajo; limpio nuevo la herida, coloco una crema para el dolor e inflamación y la cubr
