Janelle Hale.
Solo deseo llegar a la manada, sentir a los míos, sentir como nuestros hilos se van uniendo.
El sol brilla en su punto más alto, parpadeo varias veces sosteniéndome del pelaje de mi alfa mientras corre por el bosque.
—Despierta .—Ares me gruñe, ruedo los ojos, me sostengo más fuerte de su pelaje.
—Quien te manda a salirle con eso a Atenea.—Le recriminó, él solo bufa molestó —No me bufés, idiota, se que es tu mate y todo, pero se te olvida que es una humana ¿No podías, no lo se tardar por lo menos a que ella sintiera algo por ti? —
—Tarde dos semanas en no lanzarme encima de ella, no pude aguantar más .—Se defiende.
—Tarde dos semanas en no lanzarme encima de ella, no pude aguantar más, imbécil ¿Tenías que salir con eso? ¿Es en serio? —Me aclaro la garganta —Atenea ¿Tu crees es lo sobrenatural, todas aquellas leyendas que cuentan los humanos sobre un mundo de fantasía .—Me agachó cuando pasa por debajo de una rama—Idiota con cuidado, a veces pareces que sigues siendo un niño en vez de un Alfa.—Ares, voltea su rostro y me muerde —Auch, imbécil, bueno prosigo, ella te pregunta que porque dices humanos ¿Acaso tú no eres uno? Y tú le dices como un macho idiota de esos sacados de algunos libros donde por casualidad meten al alfa bien tapado. Y tú le dices por esto y aparece un inmenso lobo más grande que ella frente a sus ojos, de vaina la pobre no sé murió con semejante susto que le dijiste, es que tu cara es bien fea amigo .—Este intenta morderme de nuevo, pero soy más rápida y levanto mi mano burlándome de él.
—¿Qué querías que hiciera? —
¿En serio pregunto eso?
—No quería que hicieras nada .—Jalo un poco su pelaje provocando que él me gruñe en respuesta —Pero coño, existe algo llamado tacto y tú querido Alfa careces de él y ahora vemos .—Extiendo mis brazos —Corriendo por todo el bosque en busca de ella, la pobre estará que se muere —
Niego.
Ares es bien idiota, ¿Cómo se le ocurre decirle así sin más? Solo a él, es que ya no aguantaba más, tengo como un alfa un idiota. Si, su lado de mates se estaba afianzando, pero a él se le olvidó que tiene por compañera una humana que desconoce por completo este mundo.
Los humanos son débiles en algunos aspectos, incrédulos y de mente cerrada en muchas cosas, cuando ven algo fuera de lo "normal" se vuelven locos o huyen como es el caso de nuestra luna.
Un aullido nos alerta, Ares, acelera el paso.
—Para .—Él me gruñe —¡Que pares alfa idiota!—Ares, se detiene de mala gana, me bajo de un salto, camino hasta quedar frente a frente —Iré yo sola tú quédate aquí .—Niega gruñendo —Ya pareces perro, si lo harás o ella correrá otra vez, hablaré con ella y le explicaré algunas cosas, pero tú .—Lo apunto –Le contestarás todas y cada una de sus dudas.—Bufa y asiente.
Me doy media vuelta caminando hacia el lobo n***o que está mirándo detenidamente las ramas de un árbol.
—¿Está allá arriba? —Él asiente ante mi pregunta —¿Cómo subió sin matarse en el proceso, con esas pequeñas piernas?—
Estoy sorprendida con nuestra luna.
—Beta, te sorprenderías del instinto de supervivencia de los humanos o bueno casi todos algunos no tienen y por eso se mueren —Asiento estando de acuerdo con él —La luna si que tiene y de sobra, muy contraria a mi mate que cuando supo lo que era lo único que hizo fue gritarme como una loca por no haberle contado desde el inicio —
Me río hacia él y palmeo su lomo.
—Gracias, Leonardo, ve dónde está el Alfa e impide con el resto que se acerque —
Él baja la cabeza en señal de respeto, se retira corriendo hacia los otros cinco lobos que le impiden el paso a toda costa al alfa de los idiotas.
—Atenea .—La llamó veo como ella se mueve en las últimas ramas —No te vamos O puedes hacerte daño y créeme eso no sería muy gratificante tenido como compañero a aquel alfa, tranquila nada malo te vamos hacer—Le digo cuando empiezo a escalar y rápidamente me encuentro a su lado —No somos malos.—Ella pega un grito cuando me escucha a su lado, hago una mueca y me sobó el oído.
—¿No me van a comer? .—Ruedo los ojos.
–No somos caníbales .—Bueno una cosa es que nos guste la sangre de nuestra pareja, que amamos marcar a nuestras parejas cuando estamos teniendo intimidad, pero ella no debe saberlo por mi—Somos tus amigos, yo soy tu amiga .—Le sonrió cuando ella me ve —Y Ares ese alfa de pacotilla es tu mate —
—¿Qué es eso de mates? —
—Mates, es como ustedes les llamas a las almas gemelas, cabe aclarar que si existen pero nosotros no les decimos de esa forma, los que lo hacen son los hechiceros .—Ella me mira confundida —Lo siento, eso te lo explicara Ares, Mates: es el compañero que la diosa luna, nuestra diosa, la creadora de todo ser sobrenatural o de fantasía como le quieras decir a otorgado a sus hijos .—Me apunto —Es lo primordial para nosotros ya que en ellos encontramos la felicidad, plenitud, nos sentimos completos, es como si una parte que no sabías que estaba vacía se llena haciendo que nuestra felicidad sea eterna .—Ella me mira atenta —Un mate, es el que nos brinda amor, paz, tranquilidad y todos los adjetivos buenos que hay, tú .—La apunto —Eres la mate de Ares, mi Alfa ¿Sabes que es un Alfa verdad? .—Ella asiente —¿Qué es? —
Me siento como cuando estaba en la escuela y mi maestra Petunia me preguntaba.
—Un Alfa es el primero de la jerarquía, es el que guía, protege y mantiene todo en control .—Asiento.
—De acuerdo, Ares, es eso un Alfa y como hombre lobo, licántropo, metamórfico o como le quieras decir, necesita una mate y esa eres tú, su luna, su compañera. —
—Por eso era que me dicen luna .—Vuelvo a asentir —¿Que es la luna? La enfermera no dice nada, solo se aleja maldiciendo entre dientes.
¡Ay diosa mía! ¿Por qué siempre me toca lo difícil a mi?
—La luna es la mate del Alfa, la que brinda estabilidad a la manada, la mediadora, la paz de los lobos, también la que controla al alfa cuando él está fuera de sí, ella y solo ella puede hacerlo, es la única que le da paz al estar a su lado sin importar lo que pase, una manada sin luna es una manada llena de inseguridad, miedos y descontrol, un Alfa sin luna es un Alfa sádico sediento de sangre.—Ella traga fuerte —Tu eres la que mantiene la calma, eres su Luna, nuestra Luna.—Le sonrió.
–¿Yo soy todo eso? .–Asiento, ella es mucho más, su papel es grande, pero para complicarte las cosas —No soy buena para eso puesto.—Su voz se apaga, el olor a salado me llega y suspiro fuerte, no soy buena consoladora, me remuevo incómoda y la abrazó un poco incómoda.
—Eres una buena luna, Atenea nos has ayudado mucho más de lo que tú crees, Ares, estaba triste, inseguro, pero con tu llegada volvió a hacer él idiota de buen corazón de siemprd .—Ella me regala una sonrisa gigante.
—¿Y tú qué eres? —
—Yo soy su beta —
—¿No eres su hermana? —
—No .—Le soy sincera –Ares, es mi mejor amigo desde que somos niños, es mi hermano de corazón, yo nací para estar siempre con el Alfa, nací por él, soy su beta, la segunda al mando en la manada, es la que se encarga de ella cuando el Alfa se encuentra lejos o está indispuesta, mantengo a la manada con estabilidad y control con mi presencia —
—¿Ya encontraste a tu mate .—Le doy una sonrisa triste.
—Me gustaría decirte que si, pero no.—Niego—No importa aún me falta mucho años para encontrarlo, apenas tengo veintiuno seguro en un par de años lo encuentro.—Diosa que así sea —Ares, ya te encontró y como eso paso tengo más esperanza de encontrarlo pronto —
Me alejo de ella, me bajó de un salto del árbol, Atenea, me mira con la boca abierta.
—Ventajas de ser mujer lobo .—Me encojo de hombros —Si tienes más dudas, Ares, con gusto te las va a responder .—Ruedo los ojos cuando lo siento detrás de mí —Toda tuya.—Me alejo para darles espacio, escuchó el grito de Atenea para después ver cómo aterriza en los brazos de su amado como una princesa con su príncipe.
El cielo se torna de varios colores avisando el pronto anochecer, sonrió cuando divisó un poco la luna.
Oh, diosa mía cuando lo encontrare.
Tengo miedo claro que sí, mira que te encanta jugar con los destinos, mejor ejemplo imposible es Ares, quiero saber quién es él escogido para mí, solo no seas tan mala con tu elección.
Me monto en la camioneta esperando que aquel par se digne en aparecer.
Una extraña corriente me recorre todo el cuerpo haciéndome estremecer, mis caninos crecen y mis garras salen, pero como esa corriente llegó se esfumó.
—Beta Janelle ¿Estás bien? —
—Si, Jesús, estoy bien —
Estoy bien.