El canto de las aves anunciaba el comienzo de un nuevo día, la fría mañana daba paso a las múltiples obligaciones por realizar, Melissa recogía sus libros y cuadernos, para, metódicamente colocarlos dentro de su mochila, su mirada parecía fija, pero estaba perdida en la nada, Eimy la observaba, estaba perdida entre sus muchos pensamientos, ¿Y cómo no estarlo? Habían pasado ya demasiadas cosas en muy poco tiempo, y lo peor, es que estaba segura de que ese solo era el comienzo. Habían transcurrido solo dos días desde aquel baile al que acompaño a Jason, había intentado hablar con su padre sobre su inmenso parecido con el heredero Chadburn, pero este solo le había dicho que no sabía nada al respecto, Rebecca y Carson habían prometido conseguir algo de información sobre el misterioso jovencit