Capítulo 31
Una disculpa y una confesión.
En el transcurso de la mañana, Clara no había salido en ningún momento de su habitación. Ni siquiera para ir a la cocina a buscar un poco de agua, ya que lo que le habían dicho Matteo y Davide la había afectado mucho, incluso estuvo llorando de impotencia durante un rato hasta que decidió que los comentarios de ellos, al final del día, no valían tanto la pena. Ellos no habían sufrido todo lo que ella, por lo que no la llegarían a comprender nunca.
Matteo y Davide habían permanecido durante todo ese tiempo en la sala de estar, con un ánimo completamente bajo, pues todo lo que Clara les había dicho, los había afectado en gran medida, por lo que ahora solo querían verla para disculparse con ella. A pesar de sus intenciones, al ella no salir de la h
