Sinceramente mi mente era un caudal de escenas vergonzosas, no podía creer que me comporté de tal manera.
Decidí alistarme rápidamente y fugar lo antes posible de la mansión antes de que me cruzara con Luka. Eran las siete de la mañana y ya estaba súper preparada para salir velozmente de la casa. Me puse unos lentes para esconder mis enormes ojeras y avisé a Hendrick mediante mensajes que lo encontraría en la oficina directamente. Me sentía muy apenada con aquellos dos, y sobre todo con Luka.
Keyra sale de su cuarto refunfuñando despacio con ella misma mientras bajaba suavemente las escaleras del segundo piso.
–¡Fuí tremendamente una estúpida! ¡Ayshh! A uno lo moleste a altas horas para que cumpla mi capricho y encima lo ensucié vomitándolo sobre toda su ropa, al otro le hice una escen
