Chase — No, no lo está, pero tendríamos que haber el trasfondo detrás de todo eso —explica —, siempre hay un porqué que desestabilizó —explica —, no lo conocí para analizarlo, podemos decir que tenía un trastorno narcisista de la personalidad, esquizofrenia, psicópata —junta sus dedos —, tal vez alguna patología diferente, algo que vuelve al monstruo, el monstruo que es. Porque todas las enfermedades mentales, aunque no lo creas, tienen su razón de ser. — Una que le complica y arruina la vida a su entorno, que te pone a ti y a todos en una situación que puede generar mucha más violencia —gruñí en voz baja. No sé porque sentía que lo estaba justificando, cómo era posible que lo hiciera, no tenía lógica. — ¿Eso es lo que te preocupa a ti? —hablo tranquilo —, ser igual de violento