Déjame luchar por tí.

Capitulo 13. No te ilusiones.

- Faltaba un día para la boda y Alvaro no lograba localizar a Maximiliano y Eden, los busco por todos lados pero al parecer su hijo dejo dicho en la empresa que nadie lo molestará, ni siquiera su propio padre. Marian, su asistente, no le dió más información y Franco quien era el mejor amigo de su hijo tampoco le dijo nada; ya se sentía desesperado y Elena no dejaba de marcarle para pedirle explicaciones.

En un hermoso lugar...

- Eden sentía que estaba en un sueño, Maximiliano la llevo a una hermosa playa completamente privada, ella creía que después de la boda volvería a sus actividades normales pero Maximiliano y su abuelo la convencieron de tomarse unos días, extrañaba a sus alumnas pero también estaba disfrutando mucho de esas vacaciones.

- Maximiliano no dejaba de apreciar la belleza de Eden, ese pequeño bikini que llevaba puesto lo estaba haciendo sufrir, él deseaba tanto tenerla entre sus brazos.

- La miro venir hacia mí y me quedo sin aliento, de repente escucho una voz conocida detrás mío, volteo y... Elena?. Mi rostro se decencaja por completo.

_ Mi amor, hasta que te encuentro.

- Elena se acerca y me preguntó que diablos hace ella aquí?, no sé cómo pero ya me está besando, la alejo pero ya es tarde, Eden está ahí y acaba de ver todo.

_ Eden déjame explicarte. - Trato de acercarme a ella pero se aleja.

_ No es necesario Maximiliano, los dejo, compermiso.

_ Eden.- Trato de seguirla pero Elena me lo impide, se aferra a mi brazo y decido confrontarla.

_ Qué haces aquí Elena?. - Le pregunto soltandome de su agarre.

_ Amor no he sabido nada de ti, me preocupe y bueno... logré averiguar dónde estabas. Porqué nunca me platicaste de este sitio?.

_ No te platique de este lugar porque no quería. Elena te tienes que ir de aquí.

_ Qué está pasando Max? creo que he sido bastante comprensiva contigo pero parece que a ti no te importa.

_ Yo no te tengo porque dar explicaciones, tú y yo solo teníamos una relación con derechos y eso se acabó.

_ Tú no me vas a desechar así como así y sí tienes que darme explicaciones y empieza por decirme quién es esa mujerzuela.- Qué está pasando con Max, no lo comprendo. Hace unos días mi futuro con él pintaba diferente y ahora me entero que sale de viaje con otra.

_ No se te ocurra insultar a Eden, ella no es ninguna mujerzuela!.

_ A no, entonces qué es?

_ Mi esposa, Eden es mi esposa y tú la respetas.

_ Tú esposa?. Que estupidez acabas de decir?. Ella no pude ser tu esposa, tú te casarás mañana y será conmigo.

_ Qué estupidez dices Elena?. - O Elena enloqueció o hay algo de lo que no me he enterado.

_ Lo que escuchaste. Max tu padre fue a verme y aprobó nuestro matrimonio mi amor, ahora podremos casarnos y yo te ayudaré a recuperar tu empresa.

_ Mi padre te busco?. - No puedo creer que mi padre buscará a Elena y lo peor, para aprobar un matrimonio.

_ Así es amor, tu padre está de acuerdo así que vámonos de aquí y olvídate de esa mujer.

- Elena intenta besar pero en esta ocasión si logro reaccionar.

_ No Elena yo no iré a ningún lado contigo. - Quitó sus manos de mi rostro y por alguna razón me molesta el que me toque.

_ Max, mi am...

_ Elena seré claro. - la interrumpo antes de que continúe con esta tontería. _ No me importa lo que te haya dicho mi padre pero aquí quien decide con quién se casa, soy yo. Lamento que las cosas terminarán de esta manera pero tú y yo no nos volveremos a ver, esto se acabó y lo mejor será que te vayas de aquí.

_ Tú no me puedes hacer esto Maximiliano, yo siempre te he sido leal y fiel aún y cuando no fuéramos algo formal.

_ Leal y fiel?. Estás segura de eso?.

_ Yo, sí...

_ Pues no creo que mi primo Sam pueda dar fe de tus palabras. - Miro el poema en el que se convirtió el rostro de Elena al mencionar a Sam.

_ Max, yo te lo puedo explicar. - Cómo es que Max sabe de Sam? .

_ No te estoy pidiendo explicaciones y tampoco las quiero.- La tomo del brazo con fuerza y me dirijo a dónde está mi seguridad.

_ No se supone que les pago para que nadie entre aquí.

_ Señor, discúlpenos pero la señorita...

_ La señorita nada. - Se la entrego a uno de los guardias. _ Saquenla de aquí y espero que algo así no se vuelva a repetir. Miro a toda mi seguridad y creo les queda claro a lo que me refiero, mientras Elena solo me grita y maldice.

- Después de asegurarme que sacaron a Elena, doy la vuelta y voy en busca de Eden, le tengo que explicar lo que acaba de ver. Diablos!!!. Ella y yo estábamos avanzando tan bien.

****

- Voy a dónde está Maximiliano y de repente una mujer muy bonita lo llama, ella se acerca a él y simplemente lo besa. Algo en mí se mueve y no me gusta como se siente.

Maximiliano me habla pero reaccionó en seguida y recuerdo que esto solo es un contrato así que decido alejarme.

Escucho que tocan a la puerta de mi habitación, es Maximiliano y trato de respirar profundo, no quiero que él se de cuenta que me siento molesta después de ver cómo esa mujer lo beso. Sí me molestó y mucho, no voy a tolerar que me pongan como una cuernuda.

_ Eden puedo pasar.

_ Por supuesto Maximiliano.- lo invito a pasar por en realidad no tengo opción.

- Abro con mucho cuidado y le digo.

_ Eden yo, quería explicarte lo que acabas de ver hace y momento.

_ No es necesario Maximiliano.

_ Para mi lo es, no quiero que tengas una mala impresión. Eden ella...

_ Maximiliano no es necesario. - Lo interrumpo.

_ Este es solo un contrato y yo lo entiendo, solo te pido que si tienes más mujeres sean suficientemente discreto, no me gustaría quedar como una cuernuda.

_ Eden no hay más mujeres, eso te lo juro.

_ Maximiliano ya te dije que...

_ Por favor Eden, déjame explicarte.

_ NO!. Por favor sal de mi habitación, me siento cansada y quisiera dormir un poco.

_ Ok. Decido dejar de insistir, al menos por hoy. Salgo de su habitación y me siento terrible, estoy seguro que Eden debe de estar pensando lo peor de mí. Ahora solo me tocó esperar para que quiera hablarme.

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