Bien sabía Nicolai que un acto de insubordinación en un comando donde él llevaba el liderazgo tendría penalización por abandono de sitio. Cuyo castigo oscilaría entre tres meses a un año de prisión, dependiendo de la gravedad que viera en el acto doloso su superior. Por lo que esas horas cuidando a Tania de seguro podrían tener según Nicolai serias consecuencias en el código penal militar.
Sallow entró a la sala donde Nicolai hacía su trabajo, entre varias cosas daba asistencia a las detenciones de los heridos de aquellos que habían sido llevados al hospital, por lo que estaba con el jefe de la policía, como otros que se agregaban al equipo de trabajo e investigación.
—Permiso. Sargento, tiene una llamada.
Nicolai dejó lo que hacía, por suerte ya estaban terminando de corroborar datos
