Adrik podía concebir como muy diferente ese encuentro con ella. En los ojos de Lenet había una necesidad profunda y emocional al contemplarlo. Él jamás se había permitido concebir algo diferente al aceptar el placer s****l como una vía de escape a su realidad caótica y compleja, nunca tuvo oportunidad a algo diferente. Se percibió a sí mismo un tanto desconcertado al sentir que la mano suave de Lenet pasaba con suavidad sobre su pecho deslizándola a su abdomen, lo hacía con cierta fascinación y excitación, aunque tímidamente.
Para Lenet resultaba incomprensible como encantador admirar la rigidez que se notaba firme y erecta en su m*****o viril.
«¿Tomará viagra o algo como eso? Está tal cual cuando lo vi desvestirse, sensual, encantador y perfecto»
Adrik notaba como ensimismada lo segu
