Evan A pesar de los quejidos de Alan y sus miradas de reprobación, llegaron Samuel y su padre, dando un toque diferente a la velada, sobre todo por los chistes nada graciosos del abogado. Diana Beresford tiene la capacidad de olvidar los malos ratos, lo que la lleva a desentenderse por completo y a recuperar su ánimo habitual, uno que contagia a su familia. Un mensaje de Leilah llega en esos momentos, deseándome feliz navidad y año nuevo. Le devuelvo el mensaje de manera escueta, acariciando la bufanda que llevo puesta (y ella me regaló) y sintiendo la mirada del menor de los Beresford sobre mí. —¿Mensajes de feliz navidad, doctor? —escucho su voz llena de ironía, como si fuese algo imposible recibirlos a pesar de que la fecha no supone lo mismo que para todos. Quiero gritarle que es