No estaba segura de a quien debía invitar a la fiesta, pero pronto se me ocurrió Hillary, pensando en que seguramente le gustaría ir a una fiesta donde había muchos hombres guapos, ya que las cosas con Marcus no parecían estar funcionando. Ella estaba comiendo carbohidratos y eso era mala señal, quería enterarme por mi primo, pero era obvio que me mandaría de paseo si se me ocurría preguntarle. Afortunadamente, mi amiga rubia aceptó el convite y pronto estábamos preparándonos para la dichosa fiesta. Había estado esperando una ocasión especial para usar el único crop-top que tengo en el armario y este viernes parecía la indicada. Lo había comprado por insistencia de Hillary durante una salida de compras, amé el modelo y también cómo lucía, sin embargo, apenas intenté combinarlo descubrí